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Los principales problemas medioambientales debidos a procesos naturales en España, pueden ser de origen geológico, geomorfológico y los de origen atmosférico (sequías e inundaciones).En cuanto a los de origen geológico, hay que citar a los terremotos, que en España se deben a su posición en el límite entre las placas Africana y Euroasiática, pero la mayoría de los producidos son de reducida magnitud. Las regiones más afectadas son principalmente el sureste peninsular y en menor medida, los Pirineos.

Por otro lado, no nos podemos olvidar de las erupciones volcánicas de Canarias, que no son actualmente un riesgo inminente, pero sí suponen una preocupación latente, por ello, existe una serie de programas de predicción a través de sistemas de vigilancia que recogen distintos datos, sobre todo los movimientos sísmicos. La última erupción registrada en Canarias fue la del volcán del Teneguía, en el sur de la Palma en 1971.Por lo que respecta a los geomorfológicos, hacen referencia a los desprendimientos, deslizamientos causados por lluvias torrenciales, inundaciones  o terremotos. Son más frecuentes en las áreas cantábrica y mediterránea.Por último están las de origen atmosférico o climático, las sequías, riadas e inundaciones, así como las olas de calor, frío y temporales marinos.Las sequías se suelen producir en los climas mediterráneos y cuando se prolongan muchos meses o años pueden llegar a afectar gravemente a cultivos y al consumo doméstico. Provocan restricciones  de agua que en ocasiones se intentan paliar con los trasvases hidrológicos. Las riadas e inundaciones se deben a lluvias torrenciales, asociadas generalmente a la gota fría, que caen en cortos periodos de tiempo y que suelen ocurrir en otoño sobre todo en las costas mediterráneas. Se traducen en desbordamientos de ríos y arroyos que provocan grandes destrozos. En Canarias tenemos los recientes ejemplos de la isla de la Palma y del barranco de Tasarte en Gran Canaria.Los factores antrópicos agudizan en ocasiones estos problemas por la deforestación, los obstáculos que se ponen en los cauces o la invasión por el ser humano de los cauces de ríos y torrentes con cultivos o viviendas. Además está el cambio climático, que se puede traducir en una mayor frecuencia de sequías y riadas e inundaciones.



LOS PROBLEMAS MEDIOAMBIENTALES DE CANARIASEl modelo de desarrollo económico de Canarias en las últimas décadas (basado en el turismo y la construcción) ha posibilitado el progreso, pero también ha multiplicado los problemas medioambientales.En cuanto a la contaminación debemos diferenciar entre la del aire, del agua y del suelo.La contaminación del aire se debe a la emisión de gases tóxicos que provienen de la quema de combustibles fósiles y de procesos industriales. En Canarias estas emisiones son producidas por los vehículos, las centrales térmicas que producen energía. El tráfico en Canarias tiene una gran densidad por el uso masivo del coche privado;. Actualmente hay un tranvía en Tenerife y se están proyectando sendos trenes en Gran Canaria y Tenerife. Además, habría que incrementar significativamente la producción de energías renovables, para las que existen excelentes condiciones. Canarias, al igual que España, está muy lejos de cumplir los compromisos de Kyoto pues sus emisiones han aumentado. Esto se debe al importante crecimiento demográfico y económico de los últimos años.En cuanto a la contaminación del aire, se localiza en las áreas urbanas (Las Palmas de Gran Canaria-Telde, Santa Cruz de Tenerife-La Laguna).La contaminación del agua es muy importante en Canarias. La escasez e irregularidad de las precipitaciones y el excesivo consumo de agricultura  y turismo ha dado lugar a la sobreexplotación de los acuíferos. Sus consecuencias son la desaparición de arroyos que lleva aparejado la desaparición de ecosistemas vinculados a ellos (tilos de Moya) y el descenso del nivel de los acuíferos que en zonas próximas a la costa provoca la salinización de dichos acuíferos. Para mitigar el problema, de ha potenciado la desalación y depuración de aguas residuales.Por último, y en cuanto al suelo, hay que citar principalmente la erosión y la desertificación. A esto hay que añadir la extracción de áridos, las grandes obras de infraestructura y la ocupación del suelo rural por proyectos de urbanizaciones.La erosión – proceso natural – se ve intensificado en Canarias por la elevada pendiente del terreno, la deforestación (por tala o incendio) y las prácticas agrícolas y ganaderas inadecuadas.La consecuencia de la erosión extrema es la desertificación que en Canarias, es muy importante. Para evitarla, se aterrazan los terrenos de cultivos de medianías y se llevan a cabo labores de repoblación forestal.La deforestación, ha venido provocando históricamente un retroceso de las formaciones vegetales originales. Paralelamente se ha producido un avance de los matorrales y la aparición de formaciones vegetales secundarias. Para hacer frente a este proceso, existe el Plan forestal de Canarias para ampliar la cubierta forestal.

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