Gestión de Costes: La Unidad de Obra y la Medición de Actividad en Centros
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La Unidad de Obra como Medida de la Actividad en Centros de Coste
La unidad de obra es una variable que permite medir la actividad de un centro y puede ser o no el producto objeto de venta. Esta unidad de medida variará según la naturaleza de cada centro. Así, en un centro de producción se tomará como unidad de obra el tiempo de trabajo, la cantidad de material, etc. En centros de distribución es frecuente tomar como unidad de obra variables relacionadas con las ventas.
La unidad de obra permite repercutir los costes de cada centro a los productos finales en función del volumen de trabajo que la sección haya realizado para cada tipo de producto.
Características de la Unidad de Obra
Para que una variable sirva como unidad de obra, debe reunir una serie de características:
- Que sea una auténtica medida de la actividad del centro y, por tanto, deberá establecerse en función de las características tecnológicas y de funcionamiento del centro (representativa).
- Que sirva para imputar los costes del centro a los productos (o a otros centros a los que ha prestado servicio) (homogénea).
- Que sirva para evaluar la gestión de la sección desde los objetivos de eficacia y eficiencia. Entendiendo por eficacia: el cumplimiento de los objetivos marcados en el centro; y por eficiencia: el aprovechamiento óptimo de los recursos para conseguir los objetivos (analítica).
Localización e Imputación de los Factores en los Centros
La localización de los factores productivos por centros de responsabilidad se hará identificando todos los consumos que ocasionen sus actividades y que sean susceptibles de control. Esta atribución de los costes de los factores a los centros es lo que se denomina el reparto primario y permite conocer el montante de factores productivos externos que utiliza.
La imputación de los costes de los centros consiste en repercutir su coste a aquellos que lo hayan originado (principio de causalidad). Cuando existen centros auxiliares, su coste deberá ser atribuido a las secciones principales o auxiliares a las que hayan prestado servicio. De esta forma, se llegará a conocer el coste total de la actividad realizada por el centro receptor.
Modalidades para el Reparto Secundario
Existen dos modalidades para el reparto secundario:
- Imputación directa: los costes de los centros auxiliares se reparten solo entre los principales.
- Imputación indirecta: los costes de los centros auxiliares se reparten entre todos aquellos a los que han prestado servicio, incluidas las interprestaciones entre los centros de apoyo.