Aglomeraciones Urbanas: Características y Evolución en España

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Las Aglomeraciones Urbanas

Las aglomeraciones urbanas se forman cuando unas ciudades, debido a su crecimiento, conectan con otros núcleos de población. Existen varios tipos de aglomeraciones urbanas: áreas metropolitanas, conurbaciones, regiones urbanas y megalópolis. En España destacan las áreas metropolitanas.

¿Qué se entiende por área metropolitana?

Es una aglomeración urbana formada por una ciudad principal y por varios municipios de su entorno, que mantienen importantes relaciones socioeconómicas. No existe un criterio fijo pero se considera que la ciudad central debe tener al menos 50.000 habitantes.

Características del área metropolitana

  • Está presidida por una ciudad principal
  • Existen intensas relaciones económicas y sociales entre la ciudad central y los núcleos del área. En la primera se concentran actividades y empleos más especializados. Los núcleos albergan a los trabajadores que se desplazan cada día a la ciudad central.
  • Las relaciones se manifiestan en la existencia de intensos movimientos pendulares diarios, que hacen de la red de transportes y comunicaciones un elemento esencial del área metropolitana.
  • La estructura espacial se materializa en dos modelos: coronas concéntricas en torno al núcleo central; y el modelo radial, con sectores especializados que parten desde el centro hacia la periferia siguiendo las principales vías de comunicación.

Origen y evolución de las áreas metropolitanas españolas

Para analizarlas debemos diferenciar dos épocas.

Época industrial: 1930-1975

En esta época crecieron la ciudad central y los municipios del área metropolitana. La ciudad central concentraba los principales servicios y empleos ejerciendo una gran influencia sobre los núcleos satélite, que acogían a los trabajadores y a las industrias. Entre ambos se producían importantes movimientos pendulares.

Época postindustrial: desde 1975

Entre 1975 y 1995, el crecimiento demográfico de las áreas metropolitanas se estancó por el descenso de la natalidad y de la inmigración por causas económicas. Desde 1995 a 2008, su población se recuperó ligeramente por la inmigración extranjera. A partir de ese instante los efectos de la crisis económica de 2008 han reflejado un estancamiento y decrecimiento.

La ciudad central acusa más el retroceso demográfico, al difundir hacia los núcleos del área metropolitana población y actividades industriales y terciarias.

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