Análisis de las Obras Maestras de Unamuno y Baroja: Una Exploración Literaria

Clasificado en Lengua y literatura

Escrito el en español con un tamaño de 5,88 KB

Análisis de las Obras Maestras de Unamuno y Baroja: Una Exploración Literaria

“Niebla” de Miguel de Unamuno

Esta novela, considerada la más importante de Unamuno, nos invita a reflexionar sobre la figura de Augusto Pérez, un protagonista cuyo nombre ya encierra una paradoja: “Augusto” denota poderío, mientras que “Pérez” resulta un apellido común. Augusto, un hombre con grandes expectativas pero de carácter gris, se enamora de Eugenia tras una serie de sucesos que juegan con el contraste. La portera de Eugenia se convierte en fuente de información, revelando detalles sobre la vida de la joven, huérfana y en apuros económicos, en contraste con la riqueza de Augusto.

Aparece entonces Mauricio, quien incita a Eugenia a aprovecharse de Augusto para saldar sus deudas. En un giro inesperado, Eugenia decide abandonar a Augusto justo antes de la boda para marcharse con Mauricio. Este acontecimiento sume a Augusto en su estado inicial, enfrentándolo nuevamente al vacío existencial. En un acto desesperado, decide confrontar a Unamuno, a quien considera culpable de su destino.

El viaje a Salamanca en busca del autor nos introduce en la metaficción, donde Unamuno juega con los límites de la realidad y la ficción. Al no tener responsabilidad sobre las acciones de su personaje, Unamuno decide “matar” a Augusto, argumentando su inexistencia real. Augusto, en una respuesta cargada de significado, compara su situación con la de la humanidad, siendo Dios el escritor que decide sobre nosotros, en una clara alusión a la estructura calderoniana.

El final de Augusto, tras una comilona para celebrar su regreso a casa, plantea una paradoja más: la muerte como liberación y la posibilidad de trascender a través de la memoria de los lectores.

“San Manuel Bueno, mártir” de Miguel de Unamuno

En esta obra, Unamuno nos presenta a San Manuel Bueno, un sacerdote atormentado por la falta de fe en la vida eterna, un secreto que oculta a sus feligreses. La pérdida de la fe sume a San Manuel en un profundo sufrimiento interno, a pesar de lo cual continúa predicando con la misma convicción, demostrando la importancia de la fe como motor vital.

Pío Baroja: Una Mirada Pesimista a la Existencia

Pío Baroja, autor vasco que se trasladó a Madrid para estudiar medicina sin llegar a finalizarla, se caracterizó por una visión pesimista de la vida y del mundo. Sus novelas, surgidas de la observación directa de la realidad, se caracterizan por un estilo claro y conciso, con frases cortas y párrafos breves.

Con más de sesenta novelas en su haber, muchas agrupadas en trilogías, Baroja nos presenta personajes idealistas que luchan contra un mundo inmutable, donde el progreso parece imposible.

Trilogías Destacadas de Pío Baroja

Tierra Vasca

  • “La casa de Aizgorri”
  • “El mayorazgo de Labraz”
  • “Zalacaín el aventurero”

Esta trilogía se caracteriza por la presencia de hombres de acción. Zalacaín, el protagonista, lucha por sus ideales, pero la fatalidad se interpone en su camino, conduciéndolo a la destrucción.

La lucha por la vida

  • “La busca”
  • “Mala hierba”
  • “Aurora roja”

En esta trilogía, seguimos la historia de Manuel Alcázar, un joven que lucha por sobrevivir en la pobreza de Madrid. Junto a su pandilla, recurre a medios ilegales para obtener lo que la vida les niega. Perseguido por la policía, Manuel se convierte en un delincuente por necesidad. En “Mala Hierba”, su carácter conflictivo lo lleva a prisión. Finalmente, en “Aurora Roja”, busca una salida a través de la revolución, uniéndose a los anarquistas.

La raza

– “La dama errante”, “La ciudad de la niebla” y “El árbol de la ciencia”. Andrés Hurtado. Existencialismo o “El árbol de la ciencia” – consta de siete capítulos que presentan una simetría. El protagonista es un joven llamado Andrés Hurtado. Ha nacido en un pueblo, es inteligente. Se plantea dedicarse a algo que sirva para ayudar a los demás (servir, ser útil), que su paso no sea indiferente. Quiere convertirse en médico, pero al ir a Madrid se siente aislado, no tiene mucho dinero, no se relaciona con la gente, la universidad tampoco le llena. En clase no se explicaba, por lo que tenía que comprar libros para hacer frente a los exámenes tan exigentes. Le acoge un grupo de chicos “malos”. Al hacer medicina es uno de los mejores en anatomía. También hacen disección de cadáveres, pero se percata de que no existe el alma del que dicen que está formado un cuerpo (pierde la fe). Se licencia en medicina y quiere empezar a ayudar a la gente. Le mandan a un pueblo para hacer cosas que a él no le gustaba. Al final se casa, enamorado, pero se siente incapaz de estar con su mujer, experimenta rechazo hacia ella porque no ve a una persona, solo ve un cuerpo. El cuarto capítulo es el capítulo central de la novela y sirve como eje. Andrés busca consejo en su tío Iturrioz y le explica lo ocurrido, que está frustrado, triste y ha perdido el gusto por la vida, comparando la situación con la experiencia de Adán y Eva. Eva comía del árbol de la ciencia (título). Andrés tenía ilusiones que se sustentaban sobre lo que no conocía. Ahora que conoce y se acerca a la ciencia, esto no le hace feliz, y no hay solución porque ha sido expulsado del paraíso. En los capítulos siguientes aparece el hermano pequeño de Andrés, al que quiere, y este enferma. La familia confía en que Andrés pueda hacer algo por él pero él no puede, la enfermedad es incurable y muere. La naturaleza se impone y le mata. Esto le produce una gran desesperación, la vida ya no tiene sentido para él.

Entradas relacionadas: