Análisis del Retablo de Gante: La Adoración del Cordero Místico de los Hermanos Van Eyck
Clasificado en Plástica y Educación Artística
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Políptico del Cordero Místico
Estamos ante el "Políptico de la Adoración del Cordero Místico", realizado entre 1422 y 1432 por Hubert Van Eyck hasta su muerte en 1426 y continuada por su hermano Jan Van Eyck para la capilla familiar de Jacomus Vyd. Nos encontramos por lo tanto ante una obra representativa de la escuela conocida como de los "primitivos flamencos" de la que Van Eyck es uno de sus mejores representantes.
Nos encontramos ante un gran polítptico, es decir, un retablo compuesto por varias tablas, en este caso un total de veinticuatro, pintadas al óleo, técnica que se empieza a generalizar en esta escuela y que consiste en la utilización de aceite como aglutinante de los pigmentos.
Podemos diferenciar entre la composición de la cara exterior de las tablas, las que se verían cuando el retablo estuviese cerrado y las tablas internas, las que se ven con el retablo abierto.
En las tablas exteriores podemos diferenciar tres niveles. En el inferior, dentro de nichos fingidos, en los extremos aparecen representado los retratos de los donantes en actitud de oración ante las estatuas, pintadas siguiendo la técnica de la grisalla de los santos Juanes, el Bautista, quien porta un cordero, y el Evangelista, con un cáliz entre sus manos. Sobre estas tablas, ocupando el nivel intermedio aparece el tema de la Anunciación que se desarrolla a lo largo de las tablas centrales. El arcángel, de larga y blanca túnica, cabellera larga rubia y alas de coloridas plumas porta en una mano un ramo de lirios que hacen alusión a la pureza virginal de María, mientras inclina levemente la cabeza en señal de salutación. Por su parte, María, en la tabla situada en el otro extremo también viste túnica y larguísima capa blanca y parece haber sido sorprendida por el ángel en el momento en el que estaba dedicada a la lectura. Cruza las manos sobre su pecho y sobre su cabeza aparece la paloma del Espíritu Santo. La escena se desarrolla en el interior de una estancia representada con detallismo y siguiendo los principios de la perspectiva lineal para crear sensación de profundidad. Así al fondo de la habitación se abre un mirador cuyo paisaje al fondo, representado en un prodigio de detallismo…., al igual que la segunda estancia que se abre en la tabla donde se encuentra la Virgen y en la que asu vez observamos al fondo una ventana. Acentúan la sensación de profundidad además de evitar la sensación de ahogo en el espacio, dado el gran tamaño de las figuras. En los cuatro compartimentos superiores aparecen a la izquierda el profeta Zacarías y la sibila Eritrea, mientras que a la derecha lo hacen el profeta Miqueas y la Sibila Cumana. Todos ellos llevan letreros donde narran sus visiones proféticas.
En las tablas interiores, las que observamos una vez abierto el retablo, podemos distinguir dos zonas claramente diferenciadas. Se puede observar como las tablas superiores muestran un menor número de figuras pero de tamaño considerablemente mayor que las tablas inferiores donde vemos un número mayor de figuras de menor tamaño.
Si observamos las tablas superiores, la tabla central está ocupada por la figura de gran tamaño y cuerpo completo de Dios Padre, quien, sentado en un trono y vestido con túnica y manto rojo, va coronado con la triple corona papal y lleva en la mano izquierda un cetro mientras con la derecha bendice a la vez que con los tres dedos levantados alude a la naturaleza trina de Dios. Destaca la riqueza de su vestido, joyas y bordados así como la corona que aparece a sus pies y que muestra la superioridad del poder de Dios y de la Iglesia sobre los poderes terrenales. A su derecha aparece la Virgen, sentada aunque ligeramente vuelta hacia el lugar ocupado por Dios. Representada con rasgos idealizados, larga y fina melena rubia, destaca igualmente la riqueza de su túnica y manto, azul oscuro, con bordados, así como las joyas, sobre todo la corona que porta sobre su cabeza. María lee un libro de oraciones representado con extremo realismo y minuciosidad. Un esquema similar reproduce la figura de San Juan Bautista, situado a la izquierda de Dios padre, representado con larga cabellera y barba, con túnica de piel y manto de paño verde, quien deja descansar un