Ascenso y Caída de Primo de Rivera: El Fin del Turnismo en España
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La Dictadura de Primo de Rivera (1923-1930)
Durante la primavera de 1923, se estaba gestando una conspiración desde dos movimientos distintos, aunque con el objetivo común de derrocar al Gobierno liberal. El primero, vinculado a las Juntas de Defensa de Barcelona, buscaba la disolución de las Cortes. El segundo, en Madrid, pretendía canalizar las aspiraciones del ejército africano, que deseaba un gobierno fuerte para abordar el futuro de Marruecos.
Factores que condujeron al Golpe de Estado
El 13 de septiembre de 1923, Primo de Rivera dio su golpe de Estado, dominando rápidamente la situación en la capital catalana. El Gobierno, vacilante, recurrió al monarca, Alfonso XIII, quien apoyó al general sublevado y le confió la tarea de formar gobierno. Este acto marcó el fin del régimen de Cánovas.
Causas de la Dictadura
- El fracaso y la degeneración del turnismo bipartidista.
- La insostenible situación económica y social, con un aumento de los conflictos desde 1917 debido al paro y la inflación.
- El creciente protagonismo del Ejército en la vida política del país.
- El auge de los movimientos nacionalistas periféricos, que generaban temor a una desmembración de España.
- El contexto político internacional, caracterizado por la crisis de los sistemas democráticos y la emergencia de ideologías totalitarias, como el fascismo de Mussolini en Italia.
Apoyos Sociales y Oposición
La implantación del Directorio Militar prometía un restablecimiento del orden. El golpe de Estado fue posible gracias a la actitud de la burguesía y del movimiento obrero. La burguesía se alineó con la dictadura, mientras que los obreros se mantuvieron inicialmente tranquilos. Anarquistas y comunistas se prepararon para defender su existencia. El PSOE y la UGT adoptaron una postura de aceptación y colaboración con el gobierno de Primo de Rivera.
La cuestión del catalanismo se convirtió en un foco de oposición debido a:
- La persecución de la lengua catalana.
- La intervención gubernamental en la elección de la junta del Colegio de Abogados.
- La intromisión en la esfera eclesiástica, prohibiendo el catalán en actos litúrgicos.
En el movimiento obrero, la dictadura tampoco logró frenar el creciente activismo. La CNT vio debilitada su posición frente a la UGT, lo que llevó a la creación de la Federación Anarquista Ibérica (FAI).
Los intelectuales se opusieron al régimen desde el principio, especialmente tras la destitución de Miguel de Unamuno de la Universidad de Salamanca. Las revueltas universitarias fueron reprimidas, llegando incluso al cierre de la universidad.
El descontento militar, provocado por la política de Primo de Rivera favorable a los militares destinados en Marruecos, rompió la armonía dentro del ejército y precipitó la caída del régimen. Un ejemplo de este descontento fue el fallido golpe de Estado conocido como la "Sanjuanada".
La crisis de 1929 y la creciente oposición llevaron a que, el 30 de enero de 1930, Alfonso XIII aceptara la dimisión de Primo de Rivera y encargara a Dámaso Berenguer la formación de un nuevo gobierno.
El Directorio Militar (1923-1925)
Entre 1923 y 1925, Primo de Rivera presidió el Directorio Militar, concentrando toda la administración en manos del ejército.
Medidas del Directorio:
- Suspensión de las garantías constitucionales.
- Destitución de los gobiernos civiles.
- Disolución de las Cortes.
- Intervención de ayuntamientos y diputaciones provinciales.
- Publicación del decreto de incompatibilidades.
Surgieron las figuras de los delegados gubernativos y se promulgó el Estatuto Municipal.
Instituciones de la Dictadura
Se creó la Unión Patriótica, un partido gubernamental que recogía las ansias populistas del dictador y su autoritarismo. Los miembros de los ayuntamientos y las diputaciones provinciales debían pertenecer a ella.