Auge de la Bolsa de Valores de Estados Unidos entre 1927 y 1929: Causas y Consecuencias
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El Auge de la Bolsa de Valores de Estados Unidos entre 1927 y 1929
Contexto Histórico: Estados Unidos como Potencia Económica
Para entender este auge, debemos explicar primero cómo Estados Unidos se convirtió en el principal centro financiero tras la Primera Guerra Mundial. La mayor parte de los países europeos perdieron mucho factor trabajo y capital; además, tuvieron que pagar muchas deudas que habían contraído durante la guerra y adaptarse a los cambios en el flujo de mercancías que la modificación de las fronteras, tras los Tratados de Paz, supusieron.
Los países europeos buscaron ayuda en Estados Unidos, que estaba prácticamente intacto por haberse incorporado tarde al conflicto y porque este tuvo lugar fuera de sus fronteras. Así pues, Estados Unidos aumentó su producción para abastecer los vacíos mercados europeos e invirtió capital en el extranjero. De este modo, se convirtió en la primera potencia económica mundial, desbancando a Gran Bretaña y asumiendo el papel de proveedor de mercancías y capital gracias a la innovación técnica de la producción en serie con las cadenas de montaje.
Los Felices Años 20
Esta época fue conocida como los felices años 20, popularizándose el uso del teléfono, automóvil y electrodomésticos. Toda esta coyuntura creó un clima positivo, subieron los salarios y experimentaron un aumento casi inapreciable. Por otro lado, el sector agrario entró en crisis puesto que, tras años produciendo para los europeos, se enfrentó tras la guerra a una disminución de la demanda que obligó a muchos campesinos a emigrar. Los trabajadores de la industria tradicional se vieron obligados a cambiar de empleo ante la expansión de las nuevas industrias.
El Auge Bursátil y la Burbuja Especulativa
Sin embargo, la situación económica de Estados Unidos se caracterizó por un aumento de la demanda y de la capacidad productiva. Este hecho hizo temer a los inversores que podría darse el caso de una escasez de producción; por ello, dejarían de invertir en industria para hacerlo en bolsa. Esto último provocó un auge bursátil.
En 1927, se inició una etapa de euforia inversora que desembocó en una burbuja especulativa que se mantuvo hasta 1929. Los inversores pensaban que cuanto antes compraran acciones, antes obtendrían beneficios, no del dividendo, sino de la diferencia entre el precio de compra y el de venta. A tal punto llegó la euforia, que muchos inversores llegaron a endeudarse para adquirir más acciones, convencidos de que podrían hacer frente a los pagos si vendían las que poseían.