Características Geológicas de las Áreas Silíceas y Cálcicas en España
Clasificado en Geología
Escrito el en
español con un tamaño de 2,51 KB
ROQUEDO
Área Silícea
El área silícea está integrada por rocas antiguas de la era precámbrica y primaria. Se localiza mayoritariamente en el O peninsular y presenta ramificaciones hacia la parte occidental de la cordillera cantábrica, sistema central, montes de Toledo y Sierra Morena. También se localiza en otras áreas donde quedan restos de macizos antiguos: el eje de los Pirineos, algunos sectores del Sistema Ibérico y de la cordillera costero-catalana y cordillera penibética.
La roca predominante es el granito, roca cristalina y rígida, que se altera de diversas formas creando distintos tipos de relieve granítico. En unos casos, el granito se altera químicamente y en profundidad por el agua; sus cristales se descomponen y se transforman en arena pardoamarillenta. Estas pueden alcanzar grandes espesores en los valles y zonas de escasa pendiente.
En otros casos, el granito se altera a partir de las diaclasas o fracturas de la roca; las formas son distintas según la altitud. En las áreas de alta montaña, el agua se filtra por las fracturas de las rocas y, al helarse, aumenta de volumen y las rompe. Como resultado, se forman crestas agudas y dentadas, así como canchales o acumulaciones de fragmentos de rocas rotas al pie de las montañas.
En las zonas menos elevadas, las formas dependen de la disposición de las fracturas. Si las diaclasas son paralelas a la superficie, el granito se disgrega lentamente y origina un paisaje de formas suavemente onduladas llamadas domas. Si las diaclasas son perpendiculares, se forman bolas; estas pueden quedar amontonadas unas sobre otras formando barrocales. En ellos son típicos los tores (apilamiento de bolas) y las rocas caballeras. Otras veces, las bolas se disponen en las laderas de las montañas formando un caos granítico.
Área Cáliza
El área cáliza está integrada por rocas de la era secundaria plegadas en la era terciaria. Su localización forma una Z invertida que se extiende por los prepirineos, los montes vascos, el sector oriental de la cordillera cantábrica, el Sistema Ibérico, parte de la cordillera costero-catalana y la cordillera subbética.
La roca predominante es la caliza, roca dura que se fractura formando grietas y se disuelve fácilmente con el agua, dando lugar a un relieve kárstico con formas características como: