El Clasicismo Musical: Un Período de Transición y Belleza

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El Clasicismo Musical

El Clasicismo es un período que se enmarca entre el Barroco y el Romanticismo. Suele fecharse convencionalmente entre 1750 (muerte de J.S. Bach) y 1827 (año en el que muere Beethoven). Es una etapa corta que marca la transición de la Edad Moderna a la Edad Contemporánea.

Contexto Histórico

Es la época de la ascensión de la burguesía a amplios sectores del poder político y económico, lo cual tendrá consecuencias en el mundo de la cultura y de la música. En la segunda mitad del siglo XVIII se van a dar una serie de acontecimientos históricos importantes y reformas sociales que darán lugar a violentos movimientos de masas, destacando entre ellos "La Revolución Francesa" de 1789, hecho que romperá con las monarquías absolutas. El lema revolucionario de "Libertad, Igualdad y Fraternidad" será llevado a todos los contextos, también al de la música.

Contexto Cultural

El Clasicismo es la época de la Ilustración, un movimiento intelectual promovido por la burguesía y la pequeña nobleza, cuya principal creación fue “La Enciclopedia” de Diderot y D'Alambert que divulgará la cultura en amplias capas de la población. En Francia, al movimiento de la Ilustración se le denomina Enciclopedismo. Este movimiento encabezará la Revolución Francesa.

Los músicos encontrarán en la burguesía un nuevo público que paga por apreciar sus obras y al que debían satisfacer con creaciones entretenidas y naturales; de esta forma se van liberar poco a poco de las obligaciones de trabajar supeditados al gusto de los mecenas, obteniendo así una mayor independencia creativa pero contando con el reto de tener que depender del público para rentabilizar sus ingresos. La música irá abandonando los círculos eclesiásticos y palaciegos para desenvolverse en casas privadas de la burguesía y en espectáculos públicos.

Contexto Artístico

En este período se produce una vuelta a los ideales de la cultura clásica grecorromana, basados sobre todo en el equilibrio, la sencillez y la belleza (dejando atrás el estilo recargado del Barroco); por ello, en el resto de las artes se conoce a este período como "Neoclasicismo". No sucede esto con la música, ya que no pueden copiar los modelos clásicos porque no nos han llegado; sin embargo, sí van a compartir la “búsqueda de la belleza” y la “perfección formal”.

Entre los precursores de la música de este período podemos nombrar a dos de los hijos de Bach: C.P.E. Bach y J.C. Bach, pero los tres compositores que se van a convertir en las grandes figuras de este período son Haydn, Mozart y Beethoven, que trabajarán en Viena, ya que ésta es considerada la ciudad más importante dentro del contexto musical.

La Música Religiosa

Como ya habíamos adelantado, la música religiosa va a estar en decadencia en esta época, ya que tanto la música instrumental como la ópera se van a convertir en géneros mucho más solicitados por el público en general.

En el terreno de la música religiosa, no cabe señalar grandes cambios musicales respecto a la época anterior. Se seguirán creando prácticamente los mismos géneros, dentro de los cuales destacará la “misa”. Un tipo de misa especial que va a adquirir gran importancia en este período es el Réquiem.

El Réquiem es la música compuesta para la misa de los difuntos de la Iglesia católica. Dicha música es ligeramente distinta de la de otras misas, ya que se prescinde de las partes consideradas demasiado alegres para una ocasión de duelo.

Dentro de este tipo de género, podemos destacar el Réquiem de Mozart, obra maestra de la música clásica. Según cuenta la leyenda, esta obra le fue encargada a Mozart por un desconocido. El compositor, que entonces ya estaba gravemente enfermo, creyó que se trataba de un encargo del “más allá” para su propio funeral y murió componiendo la séptima parte de la obra que lleva por título Lacrimosa.

Esta parte termina con la palabra Amen, palabra que se utilizaba al final de la misa, algo extraño teniendo en cuenta que a Mozart aún le quedaba la mitad del réquiem por componer. La obra sería completada, siguiendo las instrucciones que el compositor dejó escritas, por su alumno Süsmayr.

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