Cólera y Fiebres Tifoideas: Prevención, Tratamiento y Control

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CÓLERA Y FIEBRES TIFOIDEAS

1. Enfermedades Diarreicas

La incidencia ha aumentado en los últimos años, siendo la 2ª causa de muerte en niños tras la neumonía. El cólera es la más terrible y estigmatizada de las enfermedades diarreicas, siendo la causa principal de mortalidad y morbilidad en la niñez, y en general, por la exposición a agua o alimentos contaminados.

2. Cólera

El cólera es causado por el Vibrio cholerae, que se transmite por contaminación fecal de agua y alimentos.

Reservorio

Los seres humanos y las fuentes de agua son los reservorios. El período de incubación es de 2 horas a 5 días y aparece de forma muy violenta, produciendo brotes explosivos.

  • El 75% es asintomático.
  • El 80% de los casos son de intensidad leve o moderada.
  • El 20% presenta diarrea grave y deshidratación, pudiendo matar a un adulto sano en horas.

Es una enfermedad diarreica aguda que, si no se trata, puede causar la muerte en horas. El 80% puede tratarse con sales de rehidratación oral. El acceso a agua potable y saneamiento son medidas decisivas, y las vacunas anticoléricas orales son un medio adicional de control. El tratamiento es suficiente con rehidratación.

a) Cepas de Vibrio Cholerae

Sólo producen cólera los serogrupos O1 y O139, responsables de los brotes epidémicos.

b) FR

Donde no se cumplen los requisitos mínimos de agua limpia y saneamiento.

c) Carga de morbilidad

Es una amenaza mundial para la salud pública e indicador de falta de desarrollo social.

f) Vacunas anticoléricas orales

Existen 2 tipos de vacunas anticoléricas, ambas elaboradas a base de bacilos muertos, y ambas brindan protección superior al 50% que dura 2 años en condiciones de endemicidad.

Dukoral

Ofrece protección a corto plazo contra el V. cholerae. Para niños de 2 a 6 años se requieren 3 dosis, y para mayores de 6 años y adultos se necesitan 2 dosis.

Shanchol

Brinda protección a más largo plazo contra el V. cholerae O1 y O139 en menores de 5 años. Se administran 2 dosis en un año.

  • Control cólera endémico

Se realiza a través de la vacunación a poblaciones más susceptibles, como niños, embarazadas, personas con VIH, y personas mayores. También se llevan a cabo campañas periódicas de vacunación masiva y se incorporan las vacunas en programas de vacunación.

  • Control cólera epidémico

Se reduce la mortalidad asegurando el tratamiento y facilitando el acceso a agua y alimentos seguros, así como la educación sanitaria. La vacunación preventiva es una medida adicional para prevenir o reducir la epidemia, y la vacunación reactiva es otra medida de control.

3. Diarrea del viajero

Se produce por cualquier tipo de microorganismo y generalmente no es muy grave.

a) Prevención:

Se recomienda controlar el agua y los alimentos, el uso de prebióticos y probióticos, y en casos especiales, el uso de antibióticos y la inmunoprofilaxis.

Probióticos y prebióticos

Prebiótico: componente no digerible de un alimento que estimula el crecimiento de la flora saprófita intestinal.
Probióticos: suplementos dietéticos de bacterias/levaduras vivas con capacidad de colonización intestinal y reducción del pH intestinal.

Antibióticos

Actualmente no se recomiendan, solo en circunstancias especiales como viajes muy cortos y de alto riesgo.

Inmunoprofilaxis Vacuna en pacientes con mayor riesgo, como aquellos con enfermedades crónicas, viajeros con mayor riesgo de adquisición, inmunosupresión, diarreas del viajero graves y recurrentes previas, deportistas de élite, políticos, entre otros.

b) Tratamiento

Diarrea leve que no altera el viaje: rehidratación con sopa y fluidos.
Diarrea media que altera el viaje, pero no incapacitante: menos de 5 deposiciones al día, sin fiebre, sin presencia de sangre ni moco en heces. Se recomienda el uso de antibióticos como rifaximina, azitromicina, ciprofloxacino o levofloxacino.
Diarrea grave: discapacitante, más de 6 deposiciones al día, fiebre superior a 38ºC y presencia de sangre en heces. El tratamiento recomendado es azitromicina; si no es efectiva, se utiliza el mismo tratamiento que en la diarrea media.

4. Fiebre tifoidea

Es causada por Salmonella typhi (S. Typhi) y se transmite por la ingestión de alimentos o bebidas contaminados por heces u orina de las personas infectadas. Es una enfermedad aguda no complicada que puede ser tratada con antibióticos, aunque existe resistencia generalizada a antimicrobianos comunes.

a) Incidencia mundial

Se estima una incidencia de 45-1000 casos por cada 100,000 habitantes.

Epidemiología

Huésped y reservorio: humanos.
Transmisión: fecal-oral, a través de agua o alimentos contaminados, y en el ámbito profesional (microbiólogos).

Sintomatología

Enfermedad aguda no complicada: fiebre prolongada, alteración de la función intestinal, dolor de cabeza, malestar y anorexia. En etapas tempranas puede haber tos bronquial.
Enfermedad complicada: presencia de sangre oculta en heces, melenas, y perforación intestinal. También puede haber alteraciones del estado mental, meningitis, encefalomielitis, síndrome de Guillain-Barré o neuritis, hemorragias, hepatitis, miocarditis, neumonía, CID, trombocitopenia o SHU.

Portadores crónicos: excreción de S. Typhi durante más de 1 año. La bacteriemia primaria se localiza en la vesícula biliar.

Tratamiento

Se recomienda el uso de amoxicilina, ampicilina y TMP-SMX con probenecid en un 60% de los casos, y ciprofloxacino o norfloxacino en un 80% de los casos. El diagnóstico se realiza a través del aislamiento de S. Typhi o Paratyphi en sangre, médula ósea, o una lesión.

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