Conceptos Clave de la Filosofía Kantiana: Giro Copernicano, Contrato Social e Ilusión Trascendental
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El Giro Copernicano de Kant: Una Nueva Perspectiva del Conocimiento
El término "Giro Copernicano" es utilizado por Immanuel Kant para describir un camino alternativo tanto al empirismo como al racionalismo, y al dogmatismo y al escepticismo. En las teorías filosóficas previas a Kant, la realidad se concebía como una verdad universalmente válida, pero Kant introdujo un cambio radical en esta comprensión del conocimiento.
Para Kant, ambas teorías (empirismo y racionalismo) tenían aciertos; no todo es experiencia, ya que el sujeto aporta algo imprescindible para que el conocimiento sea posible. El ser humano no se limita a recibir información pasivamente, sino que construye su propia imagen del mundo. Mientras que hasta entonces se había creído que el sujeto se dejaba impresionar pasivamente por las cosas, Kant descubre que son las cosas las que tienen que pasar por el filtro del sujeto para ser conocidas.
Existe una relación íntima entre sujeto y objeto, de modo que lo conocido (el fenómeno) es la síntesis entre sujeto y objeto (el noúmeno). Kant denomina a este cambio "Giro Copernicano" porque, al igual que Copérnico descubrió que eran los planetas los que giraban alrededor del sol, Kant afirma que son los objetos los que giran en torno al sujeto cognoscente.
El Contrato Social en la Filosofía Kantiana
El contrato social, según Kant, permite a los individuos salir del estado de naturaleza para entrar en el estado civil. No es un hecho histórico, sino una hipótesis racional que describe cómo debe ser administrado el Estado.
El contrato social, propio de una constitución republicana, implica la igualdad o sumisión absoluta de los individuos a una autoridad, lo cual acerca el pensamiento kantiano a Thomas Hobbes. Al mismo tiempo, garantiza la libertad, ya que el individuo es colegislador. Esto significa que ninguna ley puede ser aprobada sin su consentimiento y que, por tanto, el gobernante debe dictar las leyes como si emanasen de la voluntad general, lo cual aproxima el pensamiento de Kant al de Jean-Jacques Rousseau.
El contrato social originario ha de respetar también el principio de ciudadanía, que implica la elección de representantes. A diferencia de Rousseau, para quien todos los hombres son ciudadanos, Kant distingue entre ciudadanos activos y pasivos basándose en el criterio de posesión de tierras.
La Ilusión Trascendental: Límites del Conocimiento Metafísico
Kant describe la ilusión trascendental como una aspiración humana inherente al conocimiento absoluto. Sin embargo, según su crítica, no se puede probar ninguno de los principios fundamentales de la metafísica: la existencia de Dios, la naturaleza del mundo en su conjunto y la inmortalidad del alma.
El conocimiento intelectual tiende a enlazar conceptos desde lo particular hasta lo más general. Sin embargo, esta tendencia de la razón pura puede llevar a traspasar las barreras de los datos sensibles (los fenómenos). Por ejemplo, los fenómenos psíquicos se pretenden unificar y explicar por medio de teorías metafísicas acerca del Alma, lo que da lugar a paralogismos (errores de la razón). De igual modo, la totalidad de los fenómenos (tanto internos como externos) se intenta explicar y unificar por medio de teorías metafísicas acerca de una causa suprema (Dios), lo que también forma parte de esta ilusión trascendental, manifestándose en antinomias e ideales de la razón.