Corrientes Científicas del Siglo XIX: Del Absolutismo al Consenso
Clasificado en Filosofía y ética
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Las corrientes científicas surgen en el siglo XIX, en la modernidad. Hay dos corrientes científicas principales:
Materialismo
El materialismo, un método hermenéutico, se basa en la interpretación de textos. Parte de una teoría preestablecida para luego llegar a la base empírica (descendiente).
Empirismo
El empirismo, un método empírico, se basa en la interpretación de los hechos. Parte de la base empírica para llegar a una teoría.
Ambas corrientes tratan de refutar a la otra. Por ejemplo, en la psicología, los empiristas plantean la psicología conductista (observando las conductas), mientras que los materialistas critican su razonamiento inductivo. Un ejemplo de esto sería: si veo 2000 patos blancos, esto no quiere decir que todos los patos sean blancos (van de lo particular a lo general). Los empiristas, a su vez, critican el psicoanálisis de los materialistas porque, por ejemplo, Freud quería encontrar las leyes inmutables del inconsciente, lo cual era imposible ya que los humanos tienen variabilidad en cómo actúan.
Con la economía pasa lo mismo. Así, ambas corrientes, que tenían un criterio de verdad absoluto, entran en crisis. Surge entonces el relativismo absoluto, donde, según Lévy-Strauss, un antropólogo materialista, los empiristas europeos, mirando con los ojos de europeos, nunca van a poder llegar a la idea de progreso porque todas las culturas son diferentes.
El hecho de que haya tantas verdades como personas en el mundo pone en crisis a la ciencia porque le quita el grado de superioridad. Para solucionar esta crisis, surge la teoría consensual de la verdad, un acuerdo entre filósofos para que sus dos teorías sean válidas. Un ejemplo de esto son Newton y Einstein; ambas teorías son válidas, pero dependiendo de la época, una va a predominar más que la otra.
Esto lleva a un criterio de verdad intersubjetivo. No todo lo que se diga va a ser tomado como ciencia. En las ciencias sociales, que utilizan el método interpretativo y empírico, no hay un objeto de estudio regular. En las ciencias naturales, que utilizan el método empírico solamente, el objeto de estudio está, propiamente dicho, no hay regularidad.