Criterios Morales sobre la Vida Humana: Reflexiones Éticas y Espirituales

Criterios Morales Respecto a la Vida Humana

En el Sermón de la Montaña, el Señor recuerda el precepto: ‘No matarás’, y añade el rechazo absoluto de la ira, del odio y de la venganza. Cristo exige a sus discípulos presentar la otra mejilla y amar a los enemigos. Él mismo no se defendió y dijo a Pedro que guardase la espada en la vaina.

Respecto al Aborto

“La vida humana debe ser respetada y protegida de manera absoluta desde el momento de la concepción. Desde el primer momento de su existencia, el ser humano debe ver reconocidos sus derechos de persona, entre los cuales está el derecho inviolable de todo ser inocente a la vida.” Juan Pablo II.

Respecto a la Eutanasia

Aquellos cuya vida se encuentra disminuida o debilitada tienen derecho a un respeto especial; deben ser atendidos para que lleven una vida tan normal como sea posible. Cualesquiera que sean los motivos y los medios, la eutanasia consiste en poner fin a la vida de personas disminuidas, enfermas o moribundas. Es moralmente inaceptable.

Justicia Social

Soportando el peso del trabajo, en unión con Jesús, el hombre colabora en cierta manera con el Hijo de Dios en su obra redentora. Se muestra como discípulo de Cristo llevando la Cruz cada día, en la actividad que está llamado a realizar. El trabajo puede ser un medio de santificación y de animación de las realidades terrenas en el espíritu de Cristo.

Nacimiento de la Opción Fundamental: Nombrar los Elementos y Decir Algo de Cada Uno

Es progresiva: La opción fundamental necesita un período de maduración para que sea básica.

Relación entre opción fundamental y actitudes: La actitud es parcial y polariza una zona de nuestra existencia, dentro de la opción fundamental.

Relación entre opción fundamental y actos: Esa opción se va manifestando y concretando a través de las distintas acciones que componen el tejido de la vida humana.

La permanencia en la opción fundamental: La opción fundamental, una vez que la persona ha madurado, tiende a ser definitiva. Puede romperse, debilitarse y atenuarse. Necesita alimentarse. El mejor alimento es la oración.