La Desamortización en España: De Mendizábal a Madoz y sus Impactos Históricos
Clasificado en Historia
Escrito el en español con un tamaño de 2,31 KB
Esta beneficiaría a los poderosos. Se establecía la desamortización de los bienes de las comunidades religiosas, de la Inquisición, de los jesuitas, de las órdenes militares y de los ayuntamientos. La desamortización eclesiástica quedó interrumpida con el regreso de Fernando VII.
La Desamortización de Mendizábal
Desde el siglo XIX, esta fórmula se venía practicando cada vez que el Estado estaba en apuros económicos. Sin embargo, fue con el liberal progresista Juan Álvarez de Mendizábal, presidente del Gobierno durante la Regencia de María Cristina, cuando se aplicó con mayor fuerza, sobre todo en el ámbito eclesiástico.
Particularidades de la Desamortización de Mendizábal
- Se promulgó mediante una serie de leyes.
- Se centró en los bienes de la Iglesia, dejando de lado los de los municipios.
- Afectó de lleno al clero regular y secular.
El plan de Mendizábal aceleró su proceso de aplicación ante las necesidades económicas del Estado para hacer frente a la Guerra Carlista y, en consecuencia, no alcanzó los objetivos previstos. Los bienes raíces fueron declarados propiedad nacional y sacados a pública subasta. Mendizábal esperaba que las tierras fueran a parar a manos de los agricultores medios. Dispuso que se admitieran dos tipos de compradores: a quienes pagarían en efectivo se les concedía un plazo para cancelar la compra a un 5% de interés, y a quienes lo hicieran con títulos de deuda se les concedía un plazo menor. Ambos habrían de liquidar una quinta parte del importe en el acto de remate.
La Posterior Desamortización de Bienes Eclesiásticos
Durante la Regencia de Espartero se completó el proceso desamortizador. La desamortización de los bienes del clero regular afectó a inmuebles y tierras, incluyendo aquellas que el clero secular poseía en las ciudades. Estas propiedades fueron declaradas bienes nacionales y sacadas a subasta. Esto posibilitó a los grupos financieros la adquisición de estas propiedades, engrosando sus fortunas. Paralelamente a esta ley, otra legislación se ocupó de las necesidades de la Iglesia. La interrupción de la obra desamortizadora fue obra de Narváez, y no sería hasta la desamortización de Madoz cuando el proceso se completaría.