Descartes: Fundamentos de la Filosofía Moderna y el Idealismo

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René Descartes (1596-1650): El Padre de la Filosofía Moderna

René Descartes (1596-1650) fue un filósofo y matemático francés. Durante su juventud perteneció a las filas del ejército durante alrededor de diez años. Posteriormente regresó a París, donde solo vivió tres años, cuando decidió trasladarse a Holanda, huyendo del bullicio y buscando la soledad. Descartes hizo importantes aportaciones en geometría y realizó notables trabajos en el campo de la óptica y en anatomía. Pero su principal contribución fue sentar las bases de la filosofía moderna y de la teoría del conocimiento. Este filósofo aspiraba a transformar la filosofía en una ciencia con el rigor y la claridad de las matemáticas.

Contexto Histórico y el Surgimiento del Pensamiento Cartesiano

Para comprender el surgimiento del pensamiento de Descartes, hay que entender el contexto histórico en el cual vivió y el avance en esa época de los descubrimientos científicos. En primer lugar, la división en la iglesia, las guerras religiosas y la aparición del protestantismo. Luego, el descubrimiento de la redondez de la tierra que deja de ser el centro del universo: de manera que el hombre se ve obligado a abandonar el realismo aristotélico para entrar en una nueva etapa de profunda crisis que obliga a replantearse los principales problemas de la filosofía.

Descartes cuenta con un pasado filosófico que ha fracasado, de manera que él tiene que comenzar a hacer una filosofía con mucha más prudencia y cuidado. Ese esmero en evitar el error le imprime a la filosofía moderna un sello distintivo cuando se enfrentan a la pregunta de ¿Quién existe? Descartes se da cuenta de que la única manera de evitar el error es centrarse en cómo se llega al conocimiento, y construye una filosofía centrada en un método.

El Método Cartesiano y la Certeza del Pensamiento

Se trata entonces de descubrir una propuesta de la cual no se tenga la más mínima duda, sin caer en la formulación de conceptos sino que se logre en forma inmediata, o sea que entre el objeto y el observador no haya nada. Y entonces descubre que el pensamiento mismo es lo único capaz de alcanzar esa condición de inmediatez. Porque puede dudar de sus percepciones, pero de lo único que no puede dudar es de que está pensando. Es decir, de estar consciente es lo único que no puede dudar. De modo que para Descartes, lo que verdaderamente existe es el pensamiento; y formula la frase que lo lleva a la inmortalidad: "Pienso, luego existo". Es el origen del idealismo.

De lo que sí puede dudar es de lo que está más allá de su pensamiento, o sea de lo que alcanza a percibir en forma mediata a través de sus pensamientos.

Últimos Años y Legado

Invitado Descartes por la reina Cristina a vivir en Suecia en 1649, fallece en Estocolmo.

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