Descifrando el Libro de Buen Amor: Datación, Autoría y Estructura

Clasificado en Español

Escrito el en español con un tamaño de 2,53 KB

Libro de Buen Amor: Datación, Autoría y Estructura

Datación y Autoría

El Libro de Buen Amor es un texto del que se conservan tres manuscritos: el de Salamanca (fechado posteriormente a 1343, con el texto más largo), el de Toledo (más breve, de 1330) y el de Gayoso (nombrado así por el propietario de la obra). Dos de ellos, el de Gayoso y el de Toledo, son más breves. El de Toledo tiene una fecha más temprana, 1330, mientras que el de Salamanca data de una fecha posterior, 1343, y posee una extensión de coplas mucho más amplia.

Podría tratarse de que el manuscrito de Salamanca fuese una redacción ampliada, una doble redacción del mismo autor. Es el texto de mayor importancia de la literatura medieval y del mester de clerecía.

El Libro de Buen Amor se presenta como una autobiografía supuestamente escrita por Juan Ruiz, Arcipreste de Hita, del que no se sabe nada e incluso se puede dudar si verdaderamente existió. Hay otras propuestas, como la de Juan Rodríguez, maestro de cantares del monasterio de las Huelgas.

Marco Estructural y Ambigüedad Interpretativa

La obra consta de 15 historias amorosas en las que un personaje, en forma autobiográfica, intenta seducir a varias damas. Estas historias, de temática erótica, están enmarcadas en una serie de composiciones:

  • Epígrafe: en el epígrafe alguien nos habla en primera persona y se dirige a Dios, mostrando una preocupación amorosa.
  • Prólogo en prosa: a modo de sermón.
  • Metáforas: aparecen después del prólogo.
  • Coplas en cuaderna vía a Santa María: poemas dedicados a la Virgen.

La obra contiene alrededor de 1000 estrofas, donde predomina la cuaderna vía. El autor juega con códigos pertenecientes tanto a la juglaría como a la clerecía. La interpretación de la obra se deja a manos del lector, algo sumamente novedoso, ya que no se solía hacer en el mester de clerecía.

Al final de las historias del Arcipreste se nos dice que la interpretación de la obra es responsabilidad del lector. Se habla del libro como una especie de instrumento musical que el lector tiene que aprender a ejecutar.

Es una obra sumamente innovadora:

  • El mérito no es solo del autor, sino del lector que es capaz de interpretarla.
  • Se reivindica el papel del lector.
  • El hecho de dejar la capacidad de interpretación al lector se aleja de los cánones de la clerecía.

Entradas relacionadas: