Diseño Protésico Dental: Biomecánica y Factores Clave para el Éxito Clínico

Clasificado en Otras materias

Escrito el en español con un tamaño de 4,36 KB

Paralelígrafo Dental: Herramienta Esencial en el Diseño Protésico

Una vez diseñada la prótesis, los modelos de estudio se llevan al paralelígrafo. Es crucial entender que no es al revés. Este instrumento nos permite determinar los contornos del diente y definir los elementos constituyentes de la prótesis. Quien domina el uso del paralelígrafo puede manejar cualquier tipo de prótesis, ya que existen situaciones donde se genera palanca en el implante al salirse del eje de inserción, entre otros desafíos. Es importante destacar que la biomecánica en prótesis no está dividida, sino que es un concepto integral.

Consideraciones Biomecánicas en Prótesis Dental

La biomecánica es el estudio de la respuesta de un tejido vivo a la aplicación de una fuerza o un efecto mecánico. En el contexto protésico, esta fuerza proviene de una oclusión antagonista. Dicha fuerza posee una magnitud, una dirección, una duración y una frecuencia (número de ciclos masticatorios). Nuestro objetivo principal con esta fuerza es distribuirla, dividirla y minimizarla, de manera que sus efectos sobre los tejidos de soporte sean lo menos dañinos posibles.

Principios Fundamentales del Diseño Protésico: Soporte, Estabilidad y Retención

Estos tres elementos son principios mecánicos esenciales para cualquier diseño protésico exitoso.

1. Soporte Protésico

Prótesis Dentomucosoportadas

Para lograr el soporte, la estabilidad y la retención en estas prótesis, que se comportan como palancas de tipo I, no solo es suficiente cambiar el tope de distal a mesial y hacer que se comporten como una palanca de tipo II para controlar las tensiones en el diente pilar (como se explicó anteriormente), sino que también es fundamental evaluar otros factores clave:

  • 1.1. Longitud y Calidad del Reborde Alveolar Residual
    Longitud:

    No es lo mismo restaurar uno o dos molares que restaurar todos los dientes posteriores, ya que esto aumentaría el brazo de potencia. Todo el reborde edéntulo cubierto por una base de acrílico se comporta como un brazo de palanca; sin embargo, la existencia y efectividad de este brazo de palanca dependen directamente de la calidad del reborde.

    Calidad:

    El reborde puede presentar patrones de resorción o atróficos de forma filosa o, por el contrario, estar medianamente reabsorbido con una mucosa flácida. Ambas condiciones influyen significativamente en el soporte.

  • 1.2. Extensión y Exactitud de la Base Protésica

    Existen casos donde es necesario extender la base de acrílico hasta los límites fisiológicos de tolerancia, buscando maximizar la adhesión y el soporte para que el reborde se hunda lo menos posible.

  • 1.3. Tipo de Impresión

    Las impresiones tomadas con hidrocoloides irreversibles (alginato) permiten obtener un modelo anatómico. Sin embargo, en prótesis parciales con extremo libre (dentomucosoportadas o en voladizo), es imperativo realizar impresiones funcionales del reborde. Este tipo de impresión copia las estructuras bajo una carga simulada, garantizando un ajuste perfecto y minimizando el movimiento de la prótesis en boca, lo que a su vez controla las tensiones generadas sobre el diente pilar.

  • 1.4. Carga Oclusal

    La carga oclusal depende del antagonista. Si el antagonismo se da con una prótesis total, las fuerzas pueden ser hasta diez veces menores (10 a 12 kg de fuerza) que si el antagonismo se diera con dientes naturales (70 u 80 kg de fuerza). Además, si la prótesis es en voladizo o con extremo libre, las cargas serán mayores. Para controlar este factor, es crucial considerar la frecuencia masticatoria. Por ende, lo importante es la eficacia masticatoria.

    Mayor eficacia masticatoria = Menos frecuencia de masticación = Menor tensión

  • 1.5. Diseño del Retenedor Directo

    Es el elemento que proporciona retención a nivel del diente pilar. Aunque algunos retenedores directos demuestran en laboratorio generar menos efecto de palanca, estudios longitudinales han demostrado que no es el tipo de retenedor lo que influye decisivamente, sino su correcta ejecución y adaptación.

Entradas relacionadas: