La Encomienda en América: Sistema Colonial Español
Clasificado en Historia
Escrito el en español con un tamaño de 2,24 KB
La Encomienda en América
La Encomienda americana fue una institución característica de la colonización española en América. Era un derecho otorgado por el monarca en favor de un súbdito español, con el objeto de que este percibiera los tributos que los súbditos indios debían pagar a la monarquía. A cambio, el encomendero debía cuidar del bienestar de los indígenas en lo espiritual y en lo terrenal, asegurando su mantenimiento, su protección y su adoctrinamiento cristiano.
Fue una manera de recompensar a aquellos que se habían distinguido por sus servicios y de asegurar el establecimiento de una población española en las tierras recién descubiertas y conquistadas.
En América, esta institución debió adaptarse a una situación muy diferente y planteó problemas y controversias que no tuvo antes en España.
Origen Legal de la Encomienda
El establecimiento legal de la encomienda surgió de una Real Provisión del 20 de diciembre de 1503, en la que se establecía la libertad de los indios, su obligación de convivir con los españoles y la de trabajar para ellos a cambio de salario y manutención, junto con la obligación de los encomenderos de educar a los naturales en la fe cristiana.
Este documento pretendía garantizar la mano de obra necesaria para explotar las minas y asegurar el asentamiento de una población castellana que afianzara la colonia recién descubierta.
Funcionamiento y Desafíos
El sistema de la encomienda, implantado en la isla Española, constituía una delegación del poder real en el encomendero para recoger el tributo y usar los servicios personales de los indios. Sin embargo, la monarquía no hizo nunca concesión de este derecho, excepto en México, con Hernán Cortés.
La encomienda fue el subterfugio legal que enmascaraba los abusos cometidos por los conquistadores contra los indios. La tradición feudal y la distancia entre España y las nuevas tierras favorecían las aspiraciones señoriales de estos y limitaban el cumplimiento de las Leyes de Indias. La deplorable situación que estaban viviendo los indios provocó la denuncia de los religiosos dominicos.