Epos y Poesía Heroica: Fundamentos del Género Épico y Mitos Clásicos Griegos

Clasificado en Griego

Escrito el en español con un tamaño de 3,38 KB

El Género Épico: Definición y Características Fundamentales

La palabra griega epos (ἔπος) significa narración. La poesía épica es aquella que narra las hazañas de héroes históricos o legendarios. Por este motivo, también recibe el nombre de poesía heroica.

Naturaleza y Propósito de la Épica

La épica, como género literario, surge de la admiración que el poeta siente ante personajes de influencia colectiva, por oposición a la lírica, que nace del impulso por expresar sentimientos amorosos de tipo personal. En este género, el autor no suele adoptar una posición objetiva, ya que recoge hazañas de héroes propios de su cultura y demuestra la admiración que les profesa.

Elementos Estructurales y Formales

  • Origen: La épica comenzó siendo oral y cantada.
  • Forma: Siempre está escrita en verso y emplea una versificación majestuosa y lenta. Los poetas se sirvieron del hexámetro.
  • Tema: Canta las gestas y hazañas de los seres heroicos más reconocidos por la humanidad.
  • Figuras Heroicas: Encarnan los valores morales y las actitudes sociales más apreciados por la cultura.

Recursos Retóricos (Fórmulas)

Se utilizaban fórmulas que permitían al rapsoda una mejor memorización del texto. También eran comunes los símiles o las comparaciones.

Mitos Griegos y Romanos: Ejemplos de Narrativa Heroica y Trágica

1. Píramo y Tisbe: El Origen del Color de la Morera

En la huida [de Tisbe], se le cae el velo, y la leona, jugueteando, lo mancha de sangre. Cuando Píramo llega a la morera, ve el velo ensangrentado y descubre las huellas del animal, por lo que llega a la conclusión de que ha matado a Tisbe. Dolorido, se suicida con una espada, salpicando de sangre las moras y coloreándolas de rojo. Pasado un tiempo, la joven sale de su escondite y, viendo a su amado tendido en el suelo, lo abraza apenada y se suicida también.

2. Orfeo y Eurídice: El Viaje a los Infiernos

Orfeo estaba desposado con la Ninfa Eurídice, de la que estaba profundamente enamorado. Un día que ella estaba paseando por la orilla de un río, se encontró con el pastor Aristeo. Cautivado por su belleza, Aristeo se enamoró de ella y la persiguió por el campo. Eurídice trató de escapar, pero mientras corría tropezó con una serpiente, que la mordió con su letal veneno.

Abatido por su pérdida, Orfeo decidió viajar a los infiernos (de los que ningún mortal habría retornado jamás), para lograr que le fuera devuelta su esposa. A Perséfone (Proserpina), reina del mundo subterráneo, le conmovió tanto su pena, que accedió a su petición a cambio de que no mirase a Eurídice en el camino de vuelta a la luz. Pero a medida que se acercaba el final de su viaje, Orfeo no pudo evitar mirar hacia atrás para comprobar que su amada seguía junto a él. Al mirar, ella se desvaneció ante sus ojos y la perdió para siempre. Orfeo nunca se recuperó y vivió con ese sufrimiento el resto de sus días.

De nada.

Entradas relacionadas: