La Escultura Griega: Un Viaje por su Evolución y Obras Cumbres
Clasificado en Arte y Humanidades
Escrito el en español con un tamaño de 3,04 KB
La Escultura Griega: Belleza y Evolución de la Figura Humana
La escultura griega, con la figura humana como tema central, experimentó una rápida y notable perfección gracias a la contribución de escultores anteriores. Originalmente policromada, esta característica se ha perdido con el paso del tiempo.
Se distinguen dos tipologías principales: el relieve, presente en tímpanos, frisos y altares, y la escultura exenta, que se convirtió en el reflejo de la evolución del canon de belleza helenístico.
Periodos Clave de la Escultura Griega
El Periodo Arcaico (Siglos VII-VI a.C.)
- Se caracterizó por la representación de figuras humanas masculinas, como el Kouros (atleta desnudo), y las femeninas, llamadas Korai (mujeres vestidas, generalmente sacerdotisas).
- En cuanto a las formas y estilos, presentaban influencias orientales del Antiguo Egipto, con rigidez y frontalidad del cuerpo. Era común un ligero avance de la pierna izquierda, rostros geométricos y la característica sonrisa arcaica.
El Periodo Clásico (Siglos V-IV a.C.)
Artistas como Policleto, Mirón y Fidias se preocuparon por reproducir la figura humana con proporciones equilibradas, buscando el modelo ideal de belleza humana.
- Las figuras adoptaron posturas naturales, como el contraposto, y se estableció una proporción matemática entre la cabeza y el resto del cuerpo, reflejando un dominio técnico y una búsqueda de la belleza.
- Surgió la curva praxiteliana, un ligero arqueo de la escultura en forma de 'S' invertida, que marcó la pérdida de la rigidez y la frontalidad.
- En el postclásico, artistas como Praxíteles, Escopas y Lisipo se enfocaron en reflejar sentimientos y emociones en los rostros.
Obras Emblemáticas del Periodo Clásico:
- El Discóbolo de Mirón: Representa la belleza del movimiento en su máxima tensión.
- El Diadúmeno de Policleto: Refleja el ideal de belleza aplicado al cuerpo humano.
- Hermes y Dioniso Niño de Praxíteles: Donde se aprecia claramente la curva praxiteliana.
- El Doríforo de Policleto: En el que se aprecia el canon anatómico perfecto, donde la altura total es siete veces la cabeza.
El Periodo Helenístico (Siglos IV-I a.C.)
La escultura griega sintetiza todo el camino recorrido en las etapas anteriores, pero rompe con los cánones de serenidad y equilibrio clásicos.
- Aparecen nuevas formas caracterizadas por la tensión y el movimiento, una gran expresividad de sentimientos de sufrimiento y pasión, y un marcado realismo que busca el patetismo.
- Surgen numerosos grupos escultóricos de gran tamaño, como Laocoonte y sus hijos, y también se desarrolla el retrato.