La Esencia de la Persona Humana: Dignidad, Sexualidad y Virtudes Fundamentales
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Concepto de Persona
Somos seres únicos e irrepetibles; es decir, somos más que un miembro de nuestra especie, ya que somos arquitectos de nuestra propia vida. Según Boecio, somos "sustancia individual de naturaleza racional".
Sustancia
La persona es capaz de existir por sí misma; no somos una cualidad de una cosa. Tenemos valor en sí misma, es decir, no somos un accidente.
Individual
Somos irrepetibles y originales, tanto así que nuestra huella dactilar lo justifica.
Racional
Posee inteligencia y voluntad, pero no solo en acto, sino más bien en potencia.
Autoconocimiento y la Donación del Ser Personal
La persona se autoposee; es decir, su capacidad racional le permite tener clara conciencia de su existencia y darle un sentido a esta. A partir de lo anterior, se desprende que es capaz de formar su propia identidad y proyectarse en la vida. Nos podemos autoposeer porque tenemos la libertad para hacerlo.
Dignidad
La persona no puede ser usada como un medio para lograr otras cosas. La vida humana es digna, inviolable e infinitamente valiosa, por lo que no se justifican los atropellos a su dignidad. Posee derechos inalienables, no se le pueden arrebatar. El derecho a la vida es el primero y el más fundamental de esos derechos y la condición para tener todos los demás.
Somos Seres Sexuados
No existe persona en abstracto; toda persona humana es varón o mujer, tanto en el plano biológico como antropológico.
Fundamento Biológico
Estamos constituidos por cromosomas, los cuales contienen la información genética de un individuo. En el caso de la mujer, posee un factor XX. En el caso del varón, un factor XY. La condición sexuada es esencial a la persona humana, algo íntimo que abarca todas las facetas de lo femenino y de lo masculino.
Somos iguales y profundamente distintos:
Iguales:
- Dignidad
- Naturaleza: racional y libre
- Valor
- Derechos
Distintos:
- Modo de ser
- Vivir
- Sentir
- Fuerza
- Tamaño
- Estructura ósea
- Órganos sexuales
Es necesario aprender del otro; lo masculino y lo femenino se potencian mutuamente y posibilitan la fecundidad en todos los ámbitos. Esto es complementariedad.
Educación de la Sexualidad
La educación de la sexualidad incluye, necesariamente, aspectos de orden ético y, sobre todo, una idea clara de amor que supere los elementos biológicos y sentimentales. Dicha educación debe incluir como eje el dominio de uno mismo y el refuerzo de la voluntad que permita guiar a la persona a su plenitud física, emocional y, por sobre todo, espiritual.
Virtudes Ligadas a la Madurez Sexual y Afectiva
Templanza
Permite la moderación de los placeres, no para anularlos, sino para orientarlos positivamente, evitando que se desborden y salgan fuera del ámbito racional.
Pudor
Esta virtud permite el resguardo de la intimidad, precisamente porque hay actividades del ser humano que, por su importancia, requieren de un resguardo especial. El acto sexual humano necesita de un lugar digno, privado e íntimo, donde dos personas se puedan entregar mutuamente, lejos de la mirada del resto.