España en el Siglo XIX: Conceptos Políticos y Periodos Clave del Reinado Isabelino

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Puritanos

Rama del Partido Moderado formada durante la Década Moderada, liderada por Joaquín Francisco Pacheco, que abogaba por la Constitución de 1837 corregida con leyes orgánicas.

Guerra dels Matiners

Levantamiento guerrillero en Cataluña producido entre 1847 y 1849 (también conocida como la Segunda Guerra Carlista), que fue rápidamente sofocado por el gobierno de Isabel II.

Noche de San Daniel

Matanza de estudiantes ocurrida en Madrid en abril de 1865, ordenada por el gobierno del General Narváez, como respuesta a las protestas por la destitución de catedráticos, entre ellos Emilio Castelar, por sus ideas republicanas y críticas a la Corona.

Grito de Yara

Pronunciamiento producido a finales de 1868 con el que se inicia la Guerra Larga de Cuba (también conocida como Guerra de los Diez Años).

Cimbrios

Partidarios de la monarquía constitucional y democrática liderados por Manuel Martos y Cristino Martos y Balbi, así como por Manuel Becerra y Bermúdez, durante el Sexenio Democrático.

Sexenio Democrático

Es la etapa de la historia de España comprendida entre la Revolución de 1868 (La Gloriosa), que originó la caída de Isabel II, y la posterior restauración de la monarquía borbónica en la figura de su hijo, Alfonso XII, en diciembre de 1874.

Partido Constitucional

Partido político del Sexenio Democrático, liderado por el General Serrano y Práxedes Mateo Sagasta, formado por los unionistas y los elementos más moderados de los progresistas. Defendían la Constitución de 1869 pero desde una perspectiva más conservadora.

Partido Radical

Partido político del Sexenio Democrático, liderado por Manuel Ruiz Zorrilla, formado por progresistas y demócratas partidarios de reformas más radicales, teniendo como principio la Constitución de 1869 en su interpretación más avanzada.

Cantón

Durante la Primera República Española (1873-1874), se refiere a pequeños Estados teóricamente independientes que se federaban libremente unos con otros, en un intento de llevar el federalismo a su máxima expresión (Rebelión Cantonal).

Partido Demócrata

Partido político creado en 1849 como escisión del Partido Progresista, en oposición al régimen de Narváez. Tuvo su origen en las minorías más progresistas y republicanas. Defendían la soberanía nacional, ayuntamientos electivos, sufragio universal masculino, juicios con jurado, libertad de imprenta y asociación. Le apoyó un sector de la burguesía radical y las clases populares urbanas. Estuvieron mayormente en la oposición durante el reinado de Isabel II, siendo clave en la Revolución de 1868.

Unión Liberal

Agrupación política creada formalmente en 1858, aunque sus orígenes se remontan a 1854, bajo el liderazgo de Leopoldo O'Donnell. Fue un partido de centro que agrupaba a la facción más progresista del Partido Moderado (los "puritanos") y a los progresistas menos radicales (los "templados"). Gobernó durante el llamado "Gobierno Largo" (1858-1863).

La Década Moderada (1844-1854)

Se inicia con la llegada al poder del General Narváez. Durante esta década, los moderados implementaron una serie de medidas fundamentales para construir un estado liberal de carácter conservador:

  1. Creación de la Guardia Civil (1844): Fundada por el Duque de Ahumada, era un cuerpo militar encargado de defender la propiedad y mantener el orden público, especialmente en el ámbito rural.
  2. Reforma de la Hacienda Pública (Ley Mon-Santillán, 1845): Se intentó simplificar y racionalizar el sistema tributario, unificando impuestos (destacando la contribución territorial, industrial, de inquilinato y el impopular impuesto de consumos). Sin embargo, su diseño hizo que la carga fiscal recayera desproporcionadamente sobre las clases populares, limitando su aceptación.
  3. Reorganización de la Instrucción Pública (Plan Pidal, 1845): El Estado asumió un papel central en la organización de la enseñanza, estableciendo diferentes niveles educativos (primaria, secundaria y superior) y un sistema centralizado.
  4. Constitución de 1845: Nuevo texto constitucional de carácter moderado que sustituyó a la de 1837 y estuvo en vigor hasta 1869. Se dividía en 80 artículos recogidos en 13 títulos, reforzando el poder de la Corona y estableciendo la soberanía compartida entre el Rey y las Cortes.
  5. Ley Electoral de 1846: Estableció un sufragio censitario muy restringido (aproximadamente el 1% de la población) y la unidad electoral pasó a ser el distrito uninominal, lo que facilitaba el control gubernamental de las elecciones.
  6. Código Penal (1848, reformado en 1850 y con una nueva versión en 1851): Compendio legal que unificó las distintas leyes penales, aplicables a todos los ciudadanos del territorio nacional, estableciendo un sistema punitivo homogéneo.
  7. Concordato con la Santa Sede (1851): Firmado durante el gobierno de Juan Bravo Murillo, restableció las relaciones entre la Iglesia Católica y el Estado español, deterioradas tras la desamortización de Mendizábal. El Estado reconocía la religión católica como la oficial de la nación y se comprometía al sostenimiento del culto y clero, a cambio del reconocimiento por parte de la Iglesia de la venta de los bienes desamortizados.
  8. Reorganización de la Administración: Se reforzó el centralismo mediante el fortalecimiento de la figura de los gobernadores civiles en las provincias (nombrados por el gobierno central) y una estructura administrativa jerarquizada.

El Bienio Progresista (1854-1856)

A pesar de su corta duración, el gobierno liderado por el General Espartero (con O'Donnell como figura clave también) desarrolló una intensa labor legislativa destinada a sentar las bases de la modernización económica y política del país, aunque muchas reformas quedaron incompletas. Las principales leyes y medidas fueron:

  1. Ley de Desamortización General de Pascual Madoz (1855): Esta ley desamortizó todos los bienes que permanecían aún amortizados (no se podían vender). Afectó principalmente a:
    • Las propiedades rústicas y urbanas de los ayuntamientos (bienes de propios y comunes).
    • Propiedades del Estado y, en menor medida que la de Mendizábal, de la Iglesia (especialmente las no dedicadas directamente al culto).

    Sus principales consecuencias fueron:

    • El Estado consiguió importantes ingresos para la Hacienda, destinados en parte a la amortización de la deuda pública y a financiar la expansión del ferrocarril.
    • Provocó levantamientos populares de campesinos, que perdían el acceso a los bienes comunales, fundamentales para su subsistencia. Un ejemplo de las tensiones sociales en el campo fue la insurrección campesina de Loja en 1861 (aunque esta fecha es posterior al Bienio, es una consecuencia a medio plazo de la situación agraria).
    • Los municipios vieron mermados sus ingresos y tuvieron dificultades para pagar gastos básicos (obras públicas, médicos, maestros, etc.), lo que aumentó su dependencia del Estado central.

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