Estrategias de Educación Musical en la Primera Infancia: Instrumentos, Audición y Emociones
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Clasificación de Instrumentos en la Escuela
Los instrumentos pueden clasificarse según dos criterios principales:
Criterio 1: Forma de Ejecución
- Sacudir
- Chocar
- Pinzar
- Soplar
- Percutir
Criterio 2: Material
- Madera
- Metal
- Membrana
- Cuerda
La Audición Musical en la Educación Infantil
A través de la música clásica se transmiten sentimientos. En la escuela infantil, la audición se puede trabajar de dos maneras: de forma directa o indirecta.
Audición Indirecta
La audición indirecta ocurre cuando la música aparece en segundo plano. La utilizamos para acompañar otras actividades que estemos realizando con los niños. Por ejemplo, mientras trabajamos contenidos como los números, los animales de la granja o la psicomotricidad, la música sirve de fondo.
Audición Directa
La audición directa nos sirve para trabajar fundamentalmente dos aspectos clave: la relajación y los sentimientos.
Trabajo de la Relajación
La relajación es un aprendizaje. Cuanto antes empecemos este proceso de enseñanza, mejor.
- Utilizaremos música tranquila, de tempo lento, adecuada para este objetivo.
- Podemos empezar a partir de los 6 meses, colocando a los bebés tumbados o en brazos y ayudándolos con suaves masajes.
- Cuando son un poco más mayores, les ayudamos con palabras y frases, imaginando situaciones. Por ejemplo: «Tu cuerpo está lleno de estrellitas que van subiendo por la barriguita...»
Es recomendable informar a los padres sobre estas prácticas para que puedan continuarlas en casa. Se sugiere realizar la sesión dos veces al día.
Trabajo de los Sentimientos
Para trabajar sentimientos fundamentales como la alegría, la tristeza o el dolor, la música más adecuada es la música descriptiva.
Pautas de Implementación:
- Mantener la misma música en casa y en el colegio durante una semana.
- Repetir la sesión dos veces al día.
Taller de Sentimientos y Música Descriptiva
Se puede organizar un taller de sentimientos, trabajando con imágenes, fotos o caras de niños que expresen alegría, tristeza, etc. Según lo que la música les transmita, el niño irá identificando la cara que le corresponde.
Para hacer esta actividad más atractiva, podemos empezar contándoles la historia que el compositor ha querido transmitir. Incluso podríamos centrarnos en aspectos llamativos de la vida del compositor: cómo vestía, cómo llevaba el pelo.
Incluso podemos disfrazar a los niños y realizar un trabajo musical, representando dicha historia.