Estructura, Simbolismo y Lenguaje: La Maestría Dramática en la Obra Teatral

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La Estructura Dramática y el Simbolismo en la Obra

La obra respeta la regla de las tres unidades. A lo largo de todo el drama, solo encontramos una acción principal. El escenario, aunque único en su concepción, se desarrolla en tres lugares distintos. En cuanto al tiempo, la ausencia de la división de escenas y el desarrollo de la acción a partir de una estructura en tres actos continuados provoca la impresión de que este fluya de un modo ininterrumpido, creando la ilusión de un movimiento constante.

El Espacio: Entre el Interior y el Exterior

Por lo que respecta al espacio, el autor utiliza una relación intrínseca entre el interior y los exteriores. También destaca el contraste fundamental entre el principio de libertad y el de autoridad. Además, la casa de Bernarda está situada en un pueblo que el autor deja en la indeterminación, sin concretar su nombre, lo que universaliza su significado.

Simbolismo Espacial y su Evolución

Este fragmento, que podría pertenecer a cualquier acto donde el espacio cobra relevancia, tiene un claro significado simbólico. El mundo visible es siempre el espacio interior, que representa la opresión y el encierro. Se observa un movimiento constante hacia el interior de la casa y un alejamiento progresivo del mundo exterior, que simboliza la libertad y la vida. Esta dinámica se manifiesta en la degradación de la blancura y la paulatina pérdida de luminosidad a medida que avanza la obra, reflejando la asfixia de las protagonistas. El espacio exterior, siempre aludido pero rara vez mostrado, se enfrenta simbólicamente al interior como un anhelo inalcanzable.

El Tiempo Dramático: Escénico y No Representado

En cuanto a la técnica dramática respecto al tiempo, hallamos un tiempo escénico y uno no representado. El tiempo escénico lo indican los personajes y la acción se representa de la siguiente manera:

  • Acto I: Mediodía
  • Acto II: Tres de la tarde
  • Acto III: Noche

En el tiempo no representado, se sugiere la continuidad de la vida y los eventos que transcurren fuera de la vista del espectador, contribuyendo a la atmósfera de tensión y espera.

Técnicas Dramáticas: Texto Primario y Secundario

Haciendo referencia a las indicaciones de las acotaciones, diálogos y monólogos, se diferencia el texto dramático primario y secundario.

  • Texto Secundario: Destacan las acotaciones, que proporcionan información esencial sobre el escenario, los movimientos y las emociones de los personajes.
  • Texto Primario: Incluye los apartes (que solo se emplean en dos ocasiones exclusivamente para insultar a otro personaje), los monólogos (solo hay uno, el de la criada, que revela su perspectiva íntima) y el diálogo, donde predominan los diálogos rápidos, incisivos y breves, reflejando la tensión y la falta de comunicación real.

Abunda el lenguaje coloquial, que aporta realismo y autenticidad a las interacciones, y el lenguaje poético, que eleva el tono y añade profundidad simbólica a la obra.

El Lenguaje de los Personajes: Reflejo de su Carácter

El habla de cada personaje es un reflejo de su personalidad y rol en la obra:

  • Bernarda: Su lenguaje se identifica con mecanismos de mandato, con predominio de intervenciones secas, rápidas y cortantes. Predomina el modo imperativo, la interrogación retórica y la función apelativa del lenguaje, buscando siempre imponer su autoridad.
  • Poncia: Su lenguaje es extremadamente rico y variado; es provocadora, tentativa y a menudo utiliza el doble sentido.
  • Amelia, Magdalena y Angustias: Se caracterizan por el aburrimiento y la resignación de sus palabras, reflejo de su sumisión.
  • Adela: Se caracteriza por la fuerza y violencia verbal, manifestando su rebeldía y pasión.
  • Martirio: Abusa de las amenazas y de las insinuaciones, revelando su envidia y frustración.
  • María Josefa: Su lenguaje es una mezcla de habla infantil y de habla perturbada, simbolizando la locura y la verdad reprimida.

Conclusión: Dramatismo y Contraste

En conclusión, todas estas estrategias se utilizan para dar mayor dramatismo a la obra. En el espacio, destaca el contraste entre el principio de libertad y el de autoridad. Por lo que respecta al tiempo, no hay muchas alusiones directas, pero se observa un efecto conmovedor en la interacción entre el lenguaje coloquial y el poético, que enriquece la complejidad de la narrativa.

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