Europa y España a finales del siglo XIX: De la Paz Armada al Desastre del 98

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Europa: tensas relaciones políticas

En Europa, entre 1870 y 1914, se vivió un período conocido como la Paz Armada. Se denomina así porque, aunque aparentemente reinaba la paz, las tensiones entre las naciones europeas eran crecientes. De hecho, los países dedicaron gran parte de su industria a la fabricación de armamento.

En este contexto destacó el protagonismo de Alemania y su política exterior, que atravesó dos fases diferentes:

Los sistemas bismarckianos

El canciller de Alemania, Otto von Bismarck, creó varios sistemas de alianzas militares con Austria, Rusia e Italia. El objetivo de estos acuerdos era impedir que Francia declarase la guerra a Alemania para recobrar los territorios franceses de Alsacia y Lorena (que estaban bajo dominio alemán). Con su política exterior, Bismarck consiguió evitar los conflictos en Europa durante veinte años.

La política expansionista de Guillermo II

Cuando el emperador Guillermo II accedió al trono de Alemania, decidió prescindir de Bismarck y de sus alianzas; a cambio, inició una política de expansión que provocó tensiones entre Alemania y otros países europeos en zonas de Marruecos y la península de los Balcanes.

España: el regreso de los Borbones

La Primera República española acabó en 1874 tras un alzamiento por el que se proclamó rey de España a Alfonso XII, hijo de Isabel II. Con su reinado se restableció la monarquía parlamentaria y se inició una etapa de estabilidad política asentada en las siguientes bases:

  • El rey y las Cortes: compartían el poder legislativo.
  • La Constitución de 1876: era de carácter conservador y restablecía el sufragio restringido.
  • El bipartidismo: existencia de dos partidos oficiales, el liberal y el conservador, que manipulaban las elecciones falsificando los votos para turnarse en el poder.

Durante el reinado de Alfonso XII, los problemas más relevantes fueron una nueva guerra carlista, la oposición política de grupos como los republicanos (que se consideraban marginados por el poder) y el nacimiento de los regionalismos catalán, vasco, gallego y andaluz.

Tras la muerte de Alfonso XII, asumió la regencia su esposa, María Cristina, hasta la mayoría de edad de su hijo Alfonso XIII. En esta época se produjo el Desastre del 98, un conflicto colonial (guerra en Cuba y Filipinas) por el que España perdió sus últimas colonias (Cuba, Puerto Rico y Filipinas) y se convirtió en una potencia internacional de segundo orden.

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