Evolución de la Escritura Visigótica en la Península Ibérica: Variantes Regionales y Legado
Clasificado en Arte y Humanidades
Escrito el en
español con un tamaño de 3,25 KB
La Escritura Visigótica: Variantes Regionales y su Evolución
La escritura visigótica, lejos de presentar una unidad monolítica, experimentó una notable regionalización a lo largo de su desarrollo. Si bien en el siglo VIII se observa una tendencia hacia una mayor homogeneidad, esta se diluye progresivamente, dando paso a características distintivas en cada territorio.
Septimania y Cataluña: Vigencia Limitada
En las regiones de Septimania y Cataluña, la visigótica tuvo una vigencia relativamente escasa y desapareció tempranamente. La influencia carolingia, especialmente a partir del siglo VIII, marcó el declive de esta escritura, encontrándose los últimos vestigios en el siglo X. El Liber Iudiciorum es un texto de gran relevancia en este contexto.
Los Escriptorios Meridionales: Continuidad Mozárabe
Las comunidades mozárabes de Sevilla, Córdoba, Toledo y Mérida, sedes episcopales con una sólida continuidad cultural, mantuvieron vivo el legado escrito de la visigótica. Sus escriptorios continuaron la copia de manuscritos, principalmente códices litúrgicos y doctrinales. La conservación de estos materiales es limitada, siendo las Biblias los ejemplares más frecuentes. No se ha encontrado escritura documental de este periodo.
Dominio Astur-Leonés: Primeros Vestigios y Larga Duración
En Asturias, durante el siglo VIII, encontramos la inscripción de Santa Cruz de Cangas y la obra de Beato de Liébana. Documentos tan antiguos como el Preceptum Silonis y el diploma de Fakilo atestiguan la presencia de la escritura en esta época. Los códices visigóticos son escasos, aunque la Biblia de Cava dei Tirreni, posiblemente escrita en Oviedo, es un ejemplo notable. La escritura visigótica perduró en esta zona hasta finales del siglo XII.
Castilla: Abundancia de Códices y Transición
Castilla conserva una considerable cantidad de códices de los siglos X y XI, entre los que destacan las Biblias de Oña y León, así como manuscritos de las bibliotecas de San Millán de la Cogolla y Santo Domingo de Silos. A partir de mediados del siglo XI, se evidencia una clara influencia carolingia en los documentos.
Aragón: Centros Monásticos y Distinción Escrituraria
Los centros monásticos como Siresa, Cillas y San Andrés de Fanlo jugaron un papel crucial en Aragón. Los códices visigóticos conservados son escasos y tardíos, siendo el cartulario y la Biblia de San Juan de la Peña ejemplos representativos. La escritura sentada en documentos muestra una influencia carolingia desde el siglo XII. A partir de 1337, se establece una distinción clara: la visigótica se empleaba para Aragón y la carolingia para Cataluña, perdurando la primera hasta la segunda mitad del siglo XII.
Portugal: Riqueza Documental y Transformación
Portugal posee una rica documentación, estudiada por M. J. Azevedo Santos, que comprende aproximadamente 450 documentos, divididos equitativamente entre cursivas y redondas. La transformación hacia la escritura carolingia parece haberse consolidado a mediados del siglo XI, dominando desde 1108, aunque la visigótica continuó utilizándose hasta 1123.