La Evolución Humana: Desde los Australopitecinos hasta el Homo Sapiens

Origen del Ser Humano

El ser humano procede evolutivamente de especies animales antropoides. Los más parecidos al ser humano son los clasificados como póngidos.

Etapas Clave de la Evolución

Los Australopitecinos

Vivían en la selva hace entre tres y un millón de años. Tenían una capacidad craneal de 500 cm³ y eran bípedos. Coexistieron en la misma época que el Homo habilis, cuyos restos se han encontrado en África.

El Homo Habilis

El Homo habilis se caracteriza por una frente más ancha, un aumento de la capacidad craneal (hasta 700 cm³) y un cambio en el régimen de vida.

El Homo Erectus

El paso del Homo habilis al Homo erectus se evidencia en fósiles que datan de entre 1.5 millones hasta 300.000 años. Estos indican que no solo era bípedo, sino que caminaba erguido. Poseía entre 900 y 1200 cm³ de capacidad craneal, usaba el fuego, practicaba ritos asociados al enterramiento y construía herramientas de piedra.

El Homo Sapiens

Apareció hace unos 100.000 años en África y Oriente Medio, llegando a Europa hace 40.000 años. Era nómada y vivía de la caza, aunque posteriormente empezó a practicar la agricultura y la ganadería. Fabricaba armas e instrumentos, usaba ropa cosida y se adornaba. Enterraba y trataba a los muertos con reverencia.

El Proceso de Humanización

En un nuevo proceso que los antropólogos denominan humanización, el hombre se independiza progresivamente de la presión natural del medio, ya que se adapta a él biológicamente y actúa condicionado por su estructura fisiológica.

Diferencias Clave con los Antepasados Animales

Diferencias Bioquímicas, Genéticas y Anatómicas

Desde el punto de vista bioquímico y genético, no hay grandes diferencias entre el ser humano y los antropoides. El ser humano tiene 23 pares de cromosomas, mientras que los grandes antropoides tienen 24. Sin embargo, las diferencias anatómicas son muy significativas y debieron ser favorecidas por la selección natural.

Características Anatómicas Distintivas:

• Reducción del tamaño de los dientes y de las mandíbulas.
• Forma de la mano y habilidad manual.
• La posición bípeda y erguida (posibilitada por transformaciones en caderas y pies, lo que amplió la capacidad de observación y liberó las manos).
• Desarrollo del cerebro, cuyo tamaño se triplicó.

Diferencias de Comportamiento

Respecto al comportamiento, el ser humano muestra rasgos que lo distinguen de la vida animal, como la independencia respecto del medio y el control sobre este.

Rasgos Comportamentales Únicos:

• Capacidad de simbolización: Lo propio del ser humano es la comunicación mediante símbolos, mientras que los animales utilizan signos naturales.
• La vida en la realidad: Nuestra inteligencia permite captar las cosas como realidades, como algo distinto a nosotros, pero en relación con el entorno.