Evolución de la Prosa Española: Del 98 a las Vanguardias (Hasta 1939)
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La Narrativa Española hasta 1939
Contexto Histórico y Filosófico
La crisis del positivismo y del racionalismo dio lugar a corrientes irracionalistas y vitalistas, poniendo de manifiesto la angustia existencial. Esta crisis se acentuó con el Desastre del 98, reflejando el atraso general del país y la corrupción de las clases dominantes.
Modernismo y Generación del 98
La visión pesimista de la época propició innovaciones novelísticas. En 1902, un año clave, se publicaron en España cuatro obras fundamentales:
- La voluntad de Azorín
- Camino de perfección de Pío Baroja
- Amor y pedagogía de Miguel de Unamuno
- Sonata de otoño de Ramón María del Valle-Inclán
Los Novelistas del 98
Este grupo se caracteriza por una actitud crítica y renovadora frente a la literatura anterior, insertándose en un movimiento más amplio de jóvenes escritores opuestos a la Restauración. Sus características principales son:
- Preocupación social.
- Inquietudes religiosas y existenciales.
Los principales novelistas del 98 son:
Miguel de Unamuno
Considerado uno de los intelectuales más importantes del siglo XX, fue novelista, ensayista, poeta y dramaturgo. Algunas de sus novelas destacadas son Niebla o San Manuel Bueno, mártir. Sus temas recurrentes incluyen el conflicto del individuo con la sociedad, el conflicto entre fe y razón, la maternidad frustrada, la tradición y la intrahistoria. Unamuno denominaba a sus novelas "nivolas".
Ramón María del Valle-Inclán
Nacido en Villanueva de Arosa (Pontevedra), estudió Derecho en Santiago de Compostela, carrera que no concluyó. Ambientó Luces de bohemia en Madrid. Falleció en Santiago el 5 de enero de 1936. Su obra narrativa muestra una evolución paralela a la de sus obras dramáticas, pasando por una etapa de modernismo inicial, una fase de transición y la etapa esperpéntica.
Pío Baroja
Considerado el novelista por excelencia del grupo del 98. Sus novelas combinan el pesimismo existencial con el vitalismo individualista. Su primera novela relevante fue Camino de perfección.
Azorín (José Martínez Ruiz)
Nacido en Monóvar (Alicante), su obra más representativa de esta etapa es La voluntad, que continúa en Antonio Azorín. Su estilo se caracteriza por ser minucioso, lento y descriptivo.
Novecentismo o Generación del 14
Hacia 1914, se percibe el agotamiento de la Generación del 98 y un nuevo grupo toma el relevo: el Novecentismo (o Generación del 14). Sus características principales son el intelectualismo y una mayor atención al estilo. Las novelas novecentistas huyen del sentimentalismo y del tono apasionado de los noventayochistas, buscando una forma de expresión más clásica y depurada.
Principales Novelistas Novecentistas
- Gabriel Miró: Su estilo lírico y sensorial está muy cuidado. En sus novelas destaca la preocupación por la forma y el lenguaje.
- Ramón Pérez de Ayala: Considerado uno de los novelistas más completos del Novecentismo, destacó por su intelectualismo y su habilidad para integrar elementos líricos y ensayísticos. Sus obras más importantes incluyen Nuestro Padre San Daniel y El obispo leproso.
Vanguardias y Novela de Compromiso
La Deshumanización Vanguardista
En la década de 1920, las Vanguardias se superponen al Novecentismo. En la órbita de la Generación del 27 surgen experiencias narrativas diversas:
- Novela de humor: Representada por Wenceslao Fernández Flórez.
- Novela deshumanizada o vanguardista: Con autores como Benjamín Jarnés.
Hacia la Rehumanización y el Compromiso
En la década de 1930, como respuesta a los convulsos hechos históricos (crisis social, proclamación de la República, etc.), se produce una rehumanización de la literatura y surge la novela social o de compromiso. Sus representantes más destacados en la narrativa fueron Ramón J. Sender, César M. Arconada y Joaquín Arderíus.