Evolución de la Vida en el Paleozoico: Peces y Anfibios del Devónico al Carbonífero

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El Paleozoico: Un Viaje a la Evolución de Peces y Anfibios

En las profundidades de los océanos del Paleozoico, existieron criaturas fascinantes como Arandaspis, Drepanaspis y Hemicyclaspis. Fósiles de Arandaspis fueron encontrados en Australia, mientras que Drepanaspis se halló en Europa. En todos los casos, se trataba de animales de fondo que aspiraban los nutrientes del fango.

El Período Devónico: La Era de los Peces (hace 408 millones de años)

Durante el Eón Fanerozoico, en la Era Paleozoica, el Período Devónico fue testigo de eventos geológicos significativos, como el choque de Europa con Asia, que dio origen al supercontinente Laurasia. En el ámbito biológico, las plantas vasculares continuaron su expansión, conquistando continentes y dando lugar a los primeros bosques. El Devónico es ampliamente considerado el "Período de los Peces" debido a la aparición y diversificación de numerosos grupos.

La Revolución de las Mandíbulas

La aparición de las mandíbulas transformó radicalmente la vida de los peces. Ya no dependían exclusivamente del plancton, sino que podían atrapar presas, lo que les permitió especializarse en dietas específicas y ocupar nuevos nichos ecológicos.

Peces Notables del Devónico

  • Boreaspis: Un placodermo de principios del Devónico, de aproximadamente 13 cm de longitud. Poseía corazas frontales triangulares con espolones.
  • Doryaspis: Presentaba una prolongación frontal con púas óseas que probablemente utilizaba para remover el barro del fondo en busca de crustáceos. Sus alerones laterales le servían para impulsarse hacia arriba desde el fondo.
  • Pteraspis: De unos 20 cm de longitud. Aunque carecía de aletas laterales, su diseño le permitía moverse eficazmente.
  • Dunkleosteus: Con una cabeza acorazada provista de cuchillas dentales inusuales, este depredador de 6 metros de largo fue uno de los principales dominadores de los mares durante mucho tiempo.
  • Cladoselache: Antecesor del tiburón y muy similar a los actuales. Era un rápido nadador y cazador con dientes tricúspides alineados en 27 hileras, y llegaba a medir 2 m de largo. Tenía 5 pares de branquias y aletas con espinas.

Osteictios: Los Peces Óseos

Dentro de los Cordados, Craneados y Gnatostomados, los Osteictios (peces óseos) representan un grupo fundamental en la evolución de los vertebrados. Sus características distintivas incluyen:

  • El hueso sustituyó al cartílago como principal componente esquelético.
  • Escamas más pequeñas y delgadas.
  • Aleta caudal simétrica.
  • Presencia de vejiga natatoria.
  • 4 pares de branquias protegidas por un opérculo.

De los Actinopterigios (peces de aletas radiadas) surgieron los Teleósteos, que se diversificaron en todas las especies actuales. De los Sarcopterigios (peces de aletas lobuladas) surgieron los Dipnoos (peces pulmonados), entre los que podemos encontrar:

  • Lepidosiren: Un pez pulmonado con solo 1 par de branquias. Sus especies actuales alcanzan entre 60 y 90 cm de largo.
  • Latimeria: En 1938, Marjorie Latimer descubrió un ejemplar vivo de este pez, que se creía extinguido.
    • Tiene aletas lobuladas con capacidad de rotar.
    • Mide más de 1 m de largo.
    • La cola es simétrica con un lóbulo final.
    • Puede sumergirse a gran profundidad.
    • Pone huevos de hasta 9 cm de diámetro.
    • Su pigmentación es azulada.

La Transición de Peces a Anfibios

El Ichthyostega, con 1 m de largo, es el anfibio más primitivo que se conoce. Representa un eslabón crucial en la evolución de la vida terrestre, con características que evidencian la transición:

  • 4 patas lateralizadas que le permitían levantar la cabeza.
  • Caja torácica sólida que no se expandía al respirar, y respiraba con el saco vocal.
  • Leve movilidad de cuello.
  • Dientes en el paladar.

Cambios Evolutivos Clave

La adaptación de la vida acuática a la terrestre implicó una serie de transformaciones fundamentales:

  • Aletas articuladas y carnosas: Facilitaron la locomoción en tierra.
  • Transformación de la vejiga natatoria: La vejiga natatoria de la faringe se transformó en pulmón.
  • Circulación doble: La sangre pasa dos veces por el corazón, optimizando el transporte de oxígeno.
  • Formación de cuello: Permitió una mayor movilidad de la cabeza, crucial para la vida terrestre.
  • Dependencia del agua: Aún para la reproducción y la respiración cutánea.
  • Metamorfosis: Un ciclo de vida que incluye una fase larval acuática y una fase adulta terrestre.
  • Respiración diversificada: Branquial (en larvas), pulmonar, bucal y cutánea (en adultos).

El Período Carbonífero: La Era de los Anfibios (hace 360 millones de años)

Continuando en el Eón Fanerozoico y la Era Paleozoica, el Período Carbonífero fue la época dorada de los anfibios. Geológicamente, Gondwana se separó de Laurasia, formando un supercontinente que unía Sudamérica, África, India, Australia y Antártida.

Clima y Formación de Combustibles Fósiles

El clima cálido y húmedo de este período facilitó la aparición de vastos bosques de árboles grandes. Al caer en el agua, estos árboles aportaban grandes cantidades de carbono a los suelos pantanosos. La baja concentración de oxígeno en estas aguas pantanosas propició un proceso continuo de enterramiento y fosilización de estos restos, lo que eventualmente formó el carbón que da nombre al período. Además, los bosques del Carbonífero también contribuyeron a la formación de importantes yacimientos de petróleo.

Flora y Fauna del Carbonífero

  • Entre las plantas, las Gimnospermas se hicieron dominantes, aunque aún no existían flores en el planeta.
  • Los insectos ocuparon todos los hábitats y nichos ecológicos posibles, y algunos alcanzaron tamaños gigantescos.
  • Aparecen los reptiles primitivos, marcando el siguiente paso en la evolución de los vertebrados terrestres.

A pesar de su apariencia arbórea, los helechos gigantes de esta época no eran árboles verdaderos. Sin embargo, dominaron los continentes. Sin flores, se reproducían por esporas, y sus prótalos necesitaban mucha humedad, condiciones que el Carbonífero ofreció de manera óptima para su crecimiento.

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