Exploración de 'San Manuel Bueno, Mártir': Un Estudio Profundo
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San Manuel Bueno, Mártir: Un Estudio Detallado
Miguel de Unamuno (filósofo y escritor de la Generación del 98), escribe San Manuel Bueno, Mártir (SMBM) en 1931. Unamuno fue una persona comprometida que se preocupó por el tema de España. Además de la novela, cultivó otros géneros literarios como el ensayo. Se interesó por temas existenciales como el ser humano, la muerte y la nada. La Iglesia se opuso a esta novela porque admitía que todas las religiones son verdaderas en cuanto hacen vivir espiritualmente a quienes las profesan.
Estructura de la Obra
La narración se presenta en primera persona a través de Ángela Carballino, como si ella hubiera presenciado los hechos que ocurrían. La obra se divide en 24 secuencias con un epílogo del autor y tres partes principales:
- Primera parte (secuencias 1-8): Se presentan noticias preliminares sobre Don Manuel, que Ángela transmite de oídas o partiendo de las notas de su hermano.
- Segunda parte (secuencias 9-20): Es el cuerpo central del relato, a partir del regreso al pueblo de Ángela y Lázaro (su hermano). La narración recibe un nuevo impulso que lleva al descubrimiento del santo. Esta parte termina con la muerte del sacerdote.
- Tercera parte (secuencias 21-25): Final del relato de Ángela y epílogo del autor.
Personajes Principales
Ángela Carballino
Es una trasposición del propio autor. Vuelve a su pueblo tras haber vivido 15 años en la ciudad. Encuentra anotaciones de su hermano Lázaro al llegar y decide dar a conocer al párroco que, aunque ha abandonado su fe, vive entregado a los demás y para ayudar al prójimo.
Lázaro
Vuelve de América con ideas progresistas y anticlericales, pero finalmente se produce un acercamiento entre sus posturas y las de San Manuel. Tras la muerte de San Manuel, Lázaro ocupa su lugar.
Tema Principal
Aunque San Manuel no cree en Dios, se dedica al prójimo, lo que se describe como una "mentira consoladora". Por lo tanto, es una novela de negación y amor al prójimo, además de un pensamiento contradictorio, ya que es un hombre sin fe el que da esperanza.
Técnicas Narrativas
Se utiliza el recurso del manuscrito hallado para dar verosimilitud y acercar la realidad y la ficción.
Estilo
El estilo se caracteriza por una lengua seca, precisa, rápida y ágil. Se emplean paradojas y asíndeton.
Elipsis Narrativas
Son abundantes y cumplen dos funciones: generar tensión narrativa y dar cuenta del paso del tiempo (ejemplo: "aquellos años pasaron como un sueño", pág. 134).
Modo de Expresión
El diálogo y el monólogo interior son los modos de expresión habituales.
Reflexión Personal
La lectura del libro no ha resultado complicada en su comprensión, ya que no utiliza un vocabulario muy complejo ni literario. Su punto de vista con respecto a la religión es muy interesante, aunque no lo comparta. Su impulso desinteresado de amor al prójimo es admirable, pero no debe negar lo que es, debe afrontar y ser fiel a sus ideas.