Explorando 'Historia de una escalera': Sociedad, Tiempo y Símbolos en Buero Vallejo
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Explorando "Historia de una escalera": Sociedad, Tiempo y Símbolos en Buero Vallejo
Este documento aborda los aspectos más relevantes de la obra publicada entre 1940 y 1975, en relación con su contexto histórico y literario.
Contexto y Temática Central de "Historia de una escalera"
"Historia de una escalera", publicada por Antonio Buero Vallejo en 1949, es un drama en el que se retratan las duras condiciones de vida de los vecinos de un edificio de clase baja a través de tres generaciones. Es un retrato del ambiente social en la inmediata posguerra y de los conflictos de unos personajes que se ven encerrados en un entorno que les impide progresar, a pesar de sus ilusiones. Esta obra de teatro, una de las más conocidas de la historia del teatro español de la segunda mitad del siglo XX, es un retrato de la sociedad de su época, la cual se halla inmersa en una crisis no solo económica, sino también social.
Paralelismos Literarios y Filosóficos
En España se publicaban, casi en paralelo, en narrativa La familia de Pascual Duarte (Cela) y Nada (Laforet); en poesía, Hijos de la ira (Dámaso Alonso). También en Europa comenzaban a escucharse las primeras voces de índole existencialista, ya fuera en la literatura o en la filosofía, que claman por fijar la atención en los grupos menos favorecidos de la sociedad.
El Tiempo y la Escalera: Símbolos Centrales
Por otro lado, en Historia de una escalera se hace patente la inquietud sobre el problema del tiempo. Mientras la vida de los personajes avanza linealmente (configurada como una línea recta que comienza y acaba), por su parte, la escalera parece dotada de un tiempo eterno que nunca cesa y que, por ello, adopta la forma de un círculo. En tanto los vecinos de los que habla Buero Vallejo nacen y viven angustiados para finalmente morir, la escalera no teme el paso del tiempo.
La Escalera como Símbolo y Elemento Escenográfico
Resulta destacable el valor como símbolo que supone la escalera en esta obra dramática de Buero Vallejo. También resulta importante en la escenografía de la obra, pues la recorren muchos de los personajes sin ver mejoras en su destino; una escalera que no conduce a ningún sitio. Ese interminable recorrido por la escalera simboliza la encarnación de una vida que les tiene atados a la rueda de la necesidad, a los estadios más básicos de la existencia (comida, vestido, sueldo digno, etc.).
Lenguaje y Estilo en la Obra
En general, el léxico y las expresiones que usan los personajes en la obra resultan de fácil comprensión y tienen un carácter coloquial, si bien no resultan vulgares. La idea de Buero Vallejo parece ser respetar el decoro: que cada personaje hable según su clase social y reproducir de la manera más fiel un texto oral no planificado: una conversación entre dos interlocutores.
El Tópico "Tempus Fugit" y la Inmovilidad Social
Otro de los temas relevantes de la obra sería el tópico "tempus fugit", que subraya el paso del tiempo, en este caso con un valor baldío, pues no hace que mejore la situación de los personajes, que parecen verse confinados de forma crónica e inmutable en ese edificio.
El Teatro como Despertar de Conciencias
Como vemos, Buero Vallejo plantea un problema que trasciende el ámbito de la escena. El teatro no ha de adormecer, sino despertar las conciencias. El autor dota a la escalera de una fuerza casi vital; asistimos así a la decrepitud y desgaste de las existencias humanas que a su alrededor se configuran: somos testigos de la imposibilidad de que tales individuos puedan cambiar su destino. «Han pasado diez años que no se notan en nada», asegura uno de los personajes.