Explorando el Neoimpresionismo, Postimpresionismo y el Modernismo de Gaudí

El Neoimpresionismo

Lo que más les preocupa es la unión entre el arte y la ciencia. Se interesan sobre todo por los problemas ópticos, el color, la luz, creándose así un clima propicio para las nuevas aportaciones estéticas.

Georges Seurat: Experimenta la técnica de puntos de colores, los cuales, complementados con otros, dieron lugar a la aparición de un nuevo tono por su fusión en la visión del espectador. A esto se le llama puntillismo. Otro pintor neoimpresionista es Paul Signac.

El Postimpresionismo

Es un grupo de pintores que anteriormente habían estado unidos al impresionismo, y que después de este movimiento, realizaron sus obras más impresionantes. Los que destacan son:

Toulouse-Lautrec: No le interesa el paisaje, ni el aire libre. Suele utilizar lápices de colores, los cuales utiliza para representar escenas de circo y de cabaret. Inicia el arte de los carteles.

Paul Gauguin: Es un definidor entre el plano pictórico y la tercera dimensión de la pintura. Utiliza colores planos y arbitrarios, utilizados con valor decorativo y simbólico, el encuadre es insólito y lo que sucede tiene un aire mágico que se sitúa entre el sueño y la realidad. Quiere conseguir la pureza primitiva que Europa ha perdido.

Vincent van Gogh: Los cuadros que realiza expresan su mal estado de ánimo depresivo debido a su mala salud mental; hace pinceladas sinuosas, objetos retorcidos, colores oscuros... Van Gogh, a través de la pintura, se expresa y se libera. Él da paso a los expresionistas.

Paul Cézanne: Pinta bodegones elementales y escoge a sus amigos como modelos para poner en práctica la reducción de la realidad al cilindro, al cono y a la esfera. Inicia una operación de simplificación de síntesis de la realidad y una operación analítica. De aquí derivará el cubismo.

El Modernismo y Gaudí

El modernismo pretende crear la obra de arte total, es capaz de integrar las distintas manifestaciones artísticas, desde la arquitectura al mobiliario urbano, y desde el cartel a los objetos más íntimos. Este arte surge como placer visual, como goce para los espíritus. Aparece en las grandes metrópolis españolas, por lo que recibe diversos nombres.

La arquitectura modernista se caracteriza por introducir materiales nuevos y tradicionales en un mismo edificio. Existe una asimetría en la distribución de los vanos, masas y elementos decorativos. Intenta crear una sensación de bienestar. Tanto en las artes aplicadas, ornamentales y arquitectónicas, existen dos corrientes:

• Modernismo Orgánico: Prefiere las líneas curvas, el golpe de látigo, el arabesco, la sensación de dinamismo y la abundante decoración que imita a la naturaleza. Sus centros son París, Barcelona y Bruselas.
• Modernismo Geométrico: Prefiere la línea recta y los planos perpendiculares, persigue la armonía basada en la simplificación y sofisticación formal.

El arquitecto español más destacado es Gaudí. Sus primeras obras son parecidas al mudéjar y al gótico. Tiempo después empieza a utilizar formas orgánicas, en una de sus obras hizo columnas colosales pétreas inclinadas, empleó cubiertas de forma bulbosas y chimeneas originales. Intentó conectar la arquitectura con la naturaleza. También decoró una fachada con trencadís, que son trocitos de cerámica rotos con los que crea efectos decorativos. Una de sus obras importantes es La Sagrada Familia.