Explorando las Técnicas de Impresión Artística: Punta Seca y Huecograbado

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La Técnica de Punta Seca: Grabado y Estampación

Esta técnica se usa principalmente para producir efectos lineales aterciopelados. El artista prepara su imagen matriz, rayando su dibujo en una plancha de metal blando con una aguja de acero, produciendo incisiones que retienen la tinta. El metal desplazado por la aguja a ambos lados de los bordes de los surcos forma unos abultamientos llamados rebabas. Las rebabas retienen la tinta durante el proceso de estampación, de forma que la línea de punta seca es de calidad única; no es tan rotunda, limpia ni nítida como la del buril. Al contrario, sus límites son imprecisos, difuminados, lo que le otorga una sensación aterciopelada, que es la característica fundamental de esta técnica. La fragilidad de sus rebabas permite tiradas cortas, debido a la presión del tórculo y el desgaste propio de la estampación. Tiene gran aceptación entre los artistas gráficos contemporáneos porque, a través de esta técnica, pueden expresarse de forma libre y espontánea.

El Huecograbado o Rotograbado: Proceso y Aplicaciones

Definición y Características Fundamentales

El huecograbado o rotograbado, como también suele llamársele, es una técnica de impresión bastante difundida en la actualidad. Se caracteriza principalmente por ser una técnica donde la impresión se transfiere al papel por medio de la tinta contenida en los orificios (o alvéolos) en la superficie de la plancha. Se diferencia así del grabado tradicional, donde la impresión se realiza por medio de zonas entintadas que están en relieve.

Aplicaciones, Origen y Evolución Histórica

El huecograbado es ampliamente utilizado en la actualidad para la producción de empaques flexibles y la edición de grandes tirajes de libros, revistas y publicaciones en general. Aunque se debe a la acumulación de múltiples invenciones técnicas de impresión, el huecograbado moderno se le atribuye al inventor y artista checo Karel Klíč, quien desarrolló técnicas basadas en la aplicación de máscaras de gelatina que se endurecían bajo el efecto de la luz, las cuales protegían a las planchas de metal de la acción de los ácidos. Esto, sumado al desarrollo simultáneo de la mecanización de las prensas y técnicas de semitonos, permitió el nacimiento en Inglaterra, hacia finales del siglo XIX, de lo que en nuestros días se conoce como huecograbado.

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