Factores Clave en el Proceso de Aprendizaje: Habilidades, Práctica y Percepción

1. Habilidad

La habilidad se define como la capacidad de aprender. Se distinguen varios niveles:

• Habilidades Básicas: Proporcionan los contenidos a aprender. Incluyen la percepción, la atención y la memoria.
• Habilidades Cognitivas y Metacognitivas: Se utilizan para apropiarse de los contenidos proporcionados por las habilidades básicas. La metacognición, en particular, es la capacidad de conocer el propio conocimiento, de reflexionar sobre cómo se ha reaccionado ante un problema.

2. Práctica

Las actividades deben estar en función de las necesidades e intereses de los alumnos y de la sociedad, y en concordancia con las teorías de aprendizaje. La práctica implica procesos de fatiga, lo que puede provocar una disminución en la dedicación a la tarea y en la intención.

3. Percepción de la Tarea

Es frecuente que los alumnos realicen tareas sin comprender completamente qué están haciendo y para qué. Esta es una causa principal de apatía y falta de interés. Es crucial que el alumno sepa qué logrará con la realización de la tarea. Como señala Bruner, cualquier concepto puede explicarse a un niño si se hace a su nivel y con claridad.

4. Expectativas

Desde el inicio de su escolarización, los alumnos con buen rendimiento suelen tener expectativas más elevadas que aquellos con bajo rendimiento. En 3º y 4º de primaria, el rendimiento escolar comienza a mostrar una correlación positiva con la estimulación de sus docentes. En 6º, la percepción de los niños sobre su capacidad escolar es más realista. Estas autoevaluaciones reflejan la retroalimentación que los docentes proporcionan. La percepción que los estudiantes tienen de sus docentes, de los procesos de enseñanza y del trato diferenciado que reciben, influye en su rendimiento escolar.

5. Procesos de Atribución (Éxito/Fracaso)

Un factor que interviene en el aprendizaje es la atribución causal, es decir, la atribución que hacen los estudiantes de sus éxitos y fracasos. El concepto que tienen los alumnos sobre la causa de sus éxitos y fracasos evoluciona desde un estado indiferenciado hasta una concepción de las relaciones entre capacidad, esfuerzo y rendimiento. Los alumnos se sienten más motivados cuando atribuyen el éxito o el fracaso a su esfuerzo o a la falta de este, en lugar de atribuirlo a la capacidad, la suerte u otras personas. Los estudiantes que creen que el esfuerzo influye en su rendimiento tienen mayor probabilidad de aprender que aquellos que creen que el aprendizaje depende de los docentes u otras personas.

6. Atención

La atención se analiza desde dos perspectivas:

• Modelos Conductuales: Se centran en el tiempo que el alumno dedica a la tarea, utilizando una versión objetiva y externa de la atención (tiempo aparente).
• Modelos Cognitivos: Consideran el tiempo real que los alumnos dedican a la tarea.

La atención se perfecciona con la práctica, para lo cual se utilizan tácticas concretas:

• Introducir elementos iniciales, durante y al final de las tareas que faciliten la comprensión global.
• Señalar el objetivo que se persigue y suministrar guías.
• Identificar la idea principal, subrayar, hacer resúmenes (eficaces en el desarrollo de la atención).

Conseguir la atención interna requiere esfuerzo. Existe una relación entre la atención interna y externa del alumno. El profesor busca despertar la atención externa del alumno para que este aprenda por voluntad propia. Cuantos más sentidos se utilicen en el aprendizaje, mayores serán las posibilidades de desarrollar la atención interna.

7. Interés

El interés es un factor crucial, aunque no se desarrolla en el texto original, es fundamental para completar el análisis de los factores que influyen en el aprendizaje.