Farmacología y Terapias Clave para el Manejo de la Espasticidad

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Trihexifenidilo: Farmacología y Aplicaciones Clínicas

  • Es una amina terciaria sintética anticolinérgica.
  • Inhibe el Sistema Nervioso Autónomo Parasimpático.
  • Posee un efecto miorrelajante sobre el músculo liso.
  • Inhibe la recaptación de dopamina, prolongando su acción. Actúa eficazmente en la acinesia, rigidez, temblor, distonía y sialorrea.
  • Efectos adversos: Son de tipo anticolinérgico e incluyen obstrucción gastrointestinal, confusión, sedación, náuseas, parestesias, hipotonía y ataxia.

Toxina Botulínica: Mecanismo de Acción y Uso Terapéutico

  • Existen 7 serotipos de toxina (de A a G), que difieren en la duración del efecto, la toxicidad y el objetivo exacto de su acción.
  • El tipo A es el comúnmente usado en niños.
  • Produce una parálisis por bloqueo presináptico de la liberación de acetilcolina en la unión neuromuscular, lo que resulta en una denervación reversible de la fibra muscular y una parálisis parcial.
  • La reducción del tono muscular comienza a los 3 días y se prolonga hasta los 5 meses.
  • Se considera que el tratamiento es más eficaz si no hay contractura fija, si la espasticidad está localizada y si se asocia al tratamiento con fisioterapia.
  • La toxina puede mejorar la marcha, limitar la progresión de la deformidad durante el crecimiento, mejorar el uso de órtesis y retrasar o reducir la necesidad de cirugía correctora.
  • Es útil a nivel local para controlar la postura, mejorar el posicionamiento, reducir el dolor y facilitar la higiene y el cuidado diario.
  • En ocasiones, se aplica antes de una cirugía ortopédica (como alargamiento muscular u osteotomía) para reducir el espasmo y el dolor postoperatorio.
  • Los efectos secundarios son de intensidad leve, acción local y carácter transitorio, e incluyen: debilidad, disfunción vesical, dolor leve, astenia, alteración de la sensibilidad y parestesias.

Terapia Física: Abordajes Complementarios en el Manejo de la Espasticidad

La terapia física ofrece diversas modalidades para el manejo de la espasticidad y sus síntomas asociados:

  • Frío

    Actúa inhibiendo los músculos espásticos. Se aplica en forma de bolsas de frío local, inmersión completa en piscina, masaje con cubos de hielo o spray frío.

  • Anestesia Tópica

    Con preparados de xilocaína o benzocaína en forma de spray, pomada o gel. Los resultados descritos son muy cortos y variables.

  • Calor

    Provoca un aumento del flujo sanguíneo, relajación de los músculos espásticos y alivio del dolor. Ejemplos incluyen el uso de ultrasonido (US).

  • Electroestimulación

    Método de relajación general, aplicado directamente sobre los músculos espásticos.

  • Movilizaciones Pasivas y Estiramientos Mantenidos

    Implica un programa diario domiciliario de fisioterapia con posturas inhibitorias, movilizaciones pasivas y estiramientos.

  • Posturas Antiespásticas

    Un adecuado tratamiento postural, además de relajar el tono muscular, ayuda a mantener el recorrido articular y a prevenir el dolor y las escaras.

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