Filosofía Ética: Marxismo y Nietzsche Frente a la Moral Tradicional
Clasificado en Filosofía y ética
Escrito el en
español con un tamaño de 4,57 KB
La Perspectiva Ética del Marxismo
La doctrina marxista de la sociedad capitalista se concreta en que la mayor parte de los hombres sufre una situación de explotación económica que aniquila la esencia de su humanidad. La alienación del hombre por el hombre significa la expropiación de la libertad. Por extensión, si unos pocos enajenan la libertad de los muchos, el resultado es la desigualdad de los hombres.
Principios Fundamentales del Pensamiento Marxista
- Moralidad Relativa: Para Marx no existe una moral absoluta, pues las nociones del bien y mal cambian de una época a otra.
- Propuesta Ética y Lucha de Clases: La propuesta de Marx es ética y, al hablar de la lucha de clases, busca la construcción de una sociedad verdadera en donde la humanidad no se le niegue a nadie.
- Sociedad Inhumana vs. Sociedad Justa: Mientras el hombre no se haya organizado en una sociedad más libre y justa, la sociedad humana asumirá formas inhumanas, alienadas y alienantes.
- Crítica al Capitalismo: Al estudiar el capitalismo, Marx encuentra que es homicida y ecocida, llevando a la humanidad a la autoaniquilación.
- El Sueño de la Ciencia Transformadora: Uno de los sueños de Marx es el de una gran ciencia, la del hombre, que sería un conocimiento transformador ético. En ella el individuo, en una nueva sociedad, supera la alienación y vive de forma plenamente humana como un “individuo social”.
El marxismo es un humanismo, es decir, una propuesta ética, que busca construir de forma activa una “vida buena” para el humano. De ahí que busque implementar la terapia adecuada para posibilitar la vida del individuo social en plenitud con sus congéneres así como en relación co-dialogante con su entorno, buscando la liberación plena del ser humano a nivel individual, social y de la humanidad entera.
El vivir bien con felicidad, es decir con eudemonía, se da en la sociedad comunista del futuro, en la cual la prehistoria humana de la explotación del hombre por el hombre haya terminado y comience la verdadera historia humana, en la cual el hombre sea para el hombre.
La Crítica Radical de Nietzsche a la Moral
Nietzsche critica a los valores morales, pues debilitan a los hombres. El mayor error de la moral tradicional es la antinaturalidad, cuyo origen está en el platonismo: el mundo de las ideas sirve del “más allá” religioso y termina convirtiéndose en la metafísica cristiana.
Moral de Esclavos vs. Moral de Señores
La Moral Tradicional (Moral de Esclavos)
El hombre débil sigue los dictados de la moral tradicional, una moral de los esclavos donde lo fundamental es la resignación y el rechazo a la vida. Su raíz está en el instinto de venganza contra toda forma de vida superior. Su debilidad les impide exteriorizar su cólera, y por ello están llenos de resentimiento.
- Valoran la humildad y la amabilidad.
- Tienen como valores malvados el egoísmo y el orgullo.
La Moral Afirmativa (Moral de Señores)
La moral de los señores es la propia del hombre fuerte, que implanta valores (poder, grandeza) y quiere la muerte de Dios. Valora la valentía y la riqueza, y desprecia la cobardía y la pobreza.
El Papel del Judaísmo y el Cristianismo
El judaísmo supone el comienzo de la rebelión de los esclavos y el triunfo de la moral de los débiles. El cristianismo universaliza la rebelión. Además, con la idea de Cristo crucificado introduce la culpa en el hombre, aunque el cristianismo también nos declara libres.
Esta moral cristiana es un nihilismo que aborrece la vida y que está podrido por el resentimiento. Hay una evasión con respecto al mundo real. Se trata de una moral trascendente que gira en torno a Dios y que impone al hombre un rechazo de su naturaleza. Lo que se critica es la idea de “un orden moral y trascendente del mundo” como algo externo al hombre.
La Afirmación de la Vida
Pero esto solo es posible si imaginamos a alguien fuera del mundo, y la forma de combatirlo será negando a Dios. El hombre tiene “órdenes”, “metas”, “leyes”, pero son propias y humanas. La vida descansa sobre unas bases que están en contra de la moral tradicional, pero la vida es lo único real, la moral es ficción.