Fundamentos del Racionalismo Cartesiano: Conocimiento, Duda Metódica y la Teoría de las Tres Sustancias
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Teoría del Conocimiento Cartesiano
El método cartesiano buscaba un camino seguro hacia la certeza, pues la filosofía tradicional ofrecía respuestas múltiples y confusas. Descartes propuso derribar el saber heredado y reconstruirlo mediante un método único basado en la razón, similar al de las matemáticas.
El Método y sus Cuatro Reglas
En El discurso del método, René Descartes formuló cuatro reglas fundamentales para guiar la razón:
- Regla de la Evidencia: Aceptar solo aquello que se presenta con claridad y distinción mediante intuición intelectual, evitando la precipitación y la prevención.
- Regla del Análisis: Dividir lo complejo en tantas partes simples como sea posible para su mejor comprensión.
- Regla de la Síntesis: Reconstruir lo complejo, ascendiendo gradualmente desde los objetos más simples y fáciles de conocer hasta el conocimiento de los más compuestos, deduciendo desde lo simple.
- Regla de la Revisión (o Enumeración): Comprobar la corrección del proceso mediante revisiones y enumeraciones completas para asegurar que no se ha omitido nada.
La Naturaleza de las Ideas
Para Descartes, el conocimiento es la representación mental de lo que existe fuera de la mente, y estas representaciones son denominadas ideas. Distinguió tres tipos:
- Ideas Adventicias: Provenientes de los sentidos (experiencia externa).
- Ideas Facticias: Creadas por la imaginación y la voluntad (combinación de otras ideas).
- Ideas Innatas: Provenientes de la razón, constitutivas del verdadero conocimiento y que no derivan de la experiencia.
La Duda Metódica: El Camino a la Certeza
La duda metódica es el procedimiento fundamental para alcanzar una certeza indudable. Es un proceso:
- Metódico: Se aplica sistemáticamente como herramienta.
- Provisional: Su objetivo es ser superada para encontrar una verdad firme.
- Universal: Se aplica a todo el saber, incluyendo los sentidos y las matemáticas.
- Voluntaria: Es una decisión consciente del sujeto pensante.
Descartes duda porque los sentidos engañan, porque no puede distinguir con total seguridad entre sueño y vigilia, y porque es posible imaginar un genio maligno que lo engañe en todo. Sin embargo, de esta duda radical surge una verdad firme e irrefutable: «Pienso, luego existo» (Cogito, ergo sum).
Metafísica Cartesiana: Las Tres Sustancias
El descubrimiento del cogito lleva a identificar al yo como res cogitans, la sustancia cuyo atributo esencial es el pensamiento: entender, sentir, imaginar, dudar y ser consciente de estas operaciones. La existencia de ideas innatas (como las de pensamiento, mundo y Dios) muestra que la primera realidad indudable es el sujeto pensante.
Demostraciones de la Existencia de Dios (Res Infinita)
Dios (la res infinita) es necesario para superar la duda y garantizar la verdad del conocimiento. Descartes formula tres demostraciones principales:
- Argumento de la Causalidad de la Idea de Perfección: La idea de un ser perfecto no puede proceder de un ser imperfecto (el sujeto pensante), por lo que debe haber sido puesta en nosotros por un ser perfecto.
- Argumento de la Imperfección del Sujeto: El hecho de dudar prueba la propia imperfección y apunta a un ser perfecto que nos ha creado y que posee la perfección que a nosotros nos falta.
- Argumento Ontológico: La existencia es una perfección; por lo tanto, el ser perfecto pensado (Dios) debe necesariamente existir.
Dios es concebido como un ser perfecto, infinito, eterno, omnisciente, inmutable e independiente. Su veracidad divina garantiza la fiabilidad del conocimiento claro y distinto.
La Sustancia Extensa (Res Extensa)
La res extensa constituye los cuerpos materiales cuya esencia es la extensión en longitud, anchura y profundidad. Su existencia queda garantizada por la veracidad divina: un Dios bueno no permitiría un engaño sistemático respecto a la realidad externa que percibimos.
El mundo funciona de manera mecánica según un determinismo mecanicista: Dios da el primer impulso y el movimiento se transmite mecánicamente. En el ser humano, el cuerpo, como res extensa, es una máquina, mientras que el alma (res cogitans) dirige libremente sus movimientos.
Definición y Atributos de las Sustancias
Según Descartes, la sustancia es aquello que existe sin necesitar de ninguna otra cosa para existir (definición que, estrictamente, solo se aplica a Dios). Cada sustancia posee un atributo principal y diversos modos:
Res Cogitans (Sustancia Pensante)
- Atributo: El Pensamiento.
- Modos: Entender, recordar, imaginar, sentir, dudar.
Res Infinita (Dios)
- Atributo: La Perfección Máxima.
- Modos: No posee modos, pues es inmutable e infinito.
Res Extensa (Sustancia Material)
- Atributo: La Extensión (longitud, anchura y profundidad).
- Modos: Figura, posición, movimiento.