Grupos de Presión, Corporativismo y Partidos Políticos: Historia y Límites Conceptuales
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Grupos de Presión y Grupos de Interés: Definición y Límites
Un grupo de presión o grupo de interés es una asociación humana que no contiende en elecciones, no desea ejercer el poder, ni en principio busca cargos públicos para sus miembros. Tampoco es un partido político y se contenta con defender una determinada causa. Aparentemente, de esta definición se derivan diferencias sustanciales con un partido; sin embargo, hay varios ámbitos en que los límites entre ambas realidades son confusos.
Ámbitos de Confusión entre Partidos y Grupos de Interés
Partidos que surgen de grupos de interés. Un ejemplo es el Partido Laborista británico, que se ha convertido en una de las mayores fuerzas políticas y nació de las trade unions (los sindicatos).
Pequeños partidos que concurren a las elecciones, pero nunca obtienen representación. Dependiendo de la lectura que se haga, serán considerados partidos políticos o grupos de interés, pues saben que su objetivo principal no es obtener representación mayoritaria.
Grupos de interés que funcionan en el interior de un partido. Los grandes partidos, por ejemplo, pueden tener organizaciones no gubernamentales de apoyo, y de nuevo la clasificación dependerá de la perspectiva adoptada.
El Rol de los Grupos de Interés en el Régimen de Partido Único
En un régimen de partido único (típico de sistemas totalitarios o autoritarios), es inevitable que los grupos de interés funcionen exclusivamente dentro de la estructura de ese partido dominante.
El Corporativismo y la Doctrina Social de la Iglesia
El corporativismo se fundamenta ideológicamente en documentos clave como la encíclica Rerum Novarum (que significa «acerca de las cosas nuevas»), promulgada por el Papa León XIII.
León XIII critica tanto al liberalismo como al marxismo, argumentando que ambos promueven sociedades marcadas por el conflicto y la confrontación. En contraposición, postula la creación de sociedades armónicas en las cuales los conflictos sociales desaparezcan mediante la colaboración de clases.
Influencia del Corporativismo en Regímenes Políticos del Siglo XX
El corporativismo tuvo una influencia notable en varios regímenes políticos autoritarios y totalitarios, incluyendo el Fascismo en Italia, el Peronismo en Argentina, y en la península ibérica, el Primo-riverismo y el Franquismo en España, y el Salazarismo en Portugal.
El Neo-Corporativismo: El Pacto Tripartito
El pacto neo-corporativo es un acuerdo tripartito fundamental suscrito por el Gobierno de un país, las principales organizaciones empresariales y los sindicatos más representativos. Este tipo de acuerdo se centra en materias económicas y sociales de gran relieve.
El Caso Español: Los Pactos de la Moncloa (1977)
El ejemplo que se suele proponer en España son los Pactos de la Moncloa, firmados a finales de la década de 1970. Sin embargo, estos no se ajustan estrictamente a la idea de pacto tripartito. Aunque estuvieron presentes los tres sujetos clásicos (Gobierno, organizaciones empresariales y sindicatos), en su negociación participaron también los partidos de la oposición, ampliando así el número de actores involucrados más allá del modelo neo-corporativo estricto.