La Hispania Prerromana y la Conquista de Roma: Fases, Colonización y Legado Cultural
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Pueblos Prerromanos y Colonizaciones Históricas en la Península Ibérica
Antes de la llegada de Roma, la Península Ibérica fue un crisol de culturas. Este periodo, comprendido entre los siglos XI y IV a. C., estuvo marcado por dos grandes movimientos poblacionales:
1. Migraciones Indoeuropeas
Tuvieron lugar entre los siglos XI y IV a. C. Estos pueblos se asentaron inicialmente en el noreste (NE) peninsular y en la Meseta, expandiéndose posteriormente hacia el norte y el oeste.
2. Las Colonizaciones Históricas (Pueblos Mediterráneos)
Al mismo tiempo, en la zona meridional se asentaron pueblos provenientes del Mediterráneo. Este proceso se conoce como las colonizaciones históricas y se caracterizó por la fundación de importantes colonias:
- Fenicias: Fundaron colonias como Gadir (Cádiz) y se establecieron a lo largo de la costa malagueña y granadina (siglos XI al X a. C.).
- Griegas: Se asentaron en las costas catalanas y levantinas (siglos VIII al VII a. C.).
- Cartaginenses: Fundaron asentamientos clave como Ibiza o Cartago Nova (Cartagena) entre los siglos VI y V a. C.
Además, los griegos dejaron constancia de la civilización de los Tartessos, ubicados en el sur peninsular entre los siglos IX al VII a. C.
División Cultural Prerromana
Por último, desde comienzos del siglo V a. C., la península estaba claramente dividida en dos grandes zonas culturales:
- Pueblos Íberos: Asentados en el arco mediterráneo.
- Pueblos Celtas: Ocupando los llanos de la Meseta, el Sistema Central e Ibérico y la Cordillera Cantábrica.
La Conquista y Romanización de la Península Ibérica (Hispania)
La presencia romana en la península se extendió desde finales del siglo III a. C. hasta el siglo V d. C., culminando con la irrupción de los pueblos germanos.
Fases de la Conquista Romana
- Primera Fase (218-202 a. C.): II Guerra Púnica. Roma asegura el control del Mediterráneo occidental tras derrotar a Cartago.
- Segunda Fase (154-133 a. C.): Guerras Celtíberas y Lusitanas. Esta etapa facilitó el dominio de la Meseta y la fachada atlántica. Incluye la incorporación de las Islas Baleares en 123 a. C.
- Tercera Fase (27-19 a. C.): Guerras Cántabras. Dieron por finalizada la conquista con el dominio total del territorio cántabro-astur.
Organización Territorial y Administrativa
Roma organizó el territorio mediante el régimen provincial, cuya división evolucionó con el tiempo:
- Inicialmente: Hispania Citerior e Hispania Ulterior.
- Posteriormente: Tarraconensis, Lusitania y Baética.
- División Final: Carthaginensis, Gallaecia, Tarraconensis, Lusitania y Baética.
Las provincias estaban unidas mediante una extensa red de calzadas y se convirtieron en centros administrativos, jurídicos, políticos y económicos vitales.
El Proceso de Romanización
La romanización fue la asimilación de la cultura y las estructuras romanas por parte de los pueblos indígenas. Roma impuso sus estructuras económicas, sociales y culturales.
Estructuras Económicas
Se impusieron los latifundios, la propiedad privada y la mano de obra esclava. La base económica fue la tríada:
- Ganadería
- Agricultura
- Minería
Estructura Social
Se formó una estructura social jerárquica basada en la riqueza:
- Honestiores (clase alta)
- Humiliores (clase baja)
- Esclavos
Elementos Culturales
Se adoptaron elementos culturales fundamentales, incluyendo el latín (base de las lenguas peninsulares), la religión romana, el arte, el derecho romano y la vida urbana, entre otros.