El Imperio Bizantino: esplendor y legado de la cultura clásica

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El Imperio Bizantino

Esplendor y Legado de la Cultura Clásica

Desde la partición del Imperio romano por Teodosio (395) hasta el Cisma de Oriente (1054), Bizancio vivió una época de esplendor no exenta de conflictos internos y externos. Mezcla de elementos helenísticos, romanos, orientales y cristianos, Bizancio es depositario de la cultura clásica, intermediario entre oriente y occidente.

El Reinado de Justiniano (527-565)

El reinado de Justiniano (527-565) fue uno de los más importantes de la historia bizantina. Consiguió restaurar gran parte de la extensión del Imperio romano tal como era en tiempo de los Julio-Claudios, impuso la unidad religiosa y realizó una decisiva tarea de compilación del derecho romano.

Promovió el comercio e hizo crecer la economía y en el terreno artístico, con la construcción de Santa Sofía (532-537) da la pauta de lo que había de ser el templo bizantino.

Las Conquistas de Belisario

Su general Belisario invadió la Italia ostrogoda, entrando en Roma e incorporando la casi totalidad de la península, que se convirtió en el exarcado de Rávena. Realizó una campaña victoriosa contra Persia (544). Rechazó una invasión búlgara (559).

Expansión Territorial

Otros jefes militares se encargaron de anexionar el sureste de España, luego de entrar en una disputa sucesoria de los visigodos. También doblegaron a los eslavos de los Balcanes y aseguraron el poder bizantino en África.

Compilación del Derecho Romano

En 530 Justiniano mandó compilar todo el derecho romano.

Unidad Religiosa

Justiniano se esforzó por lograr la unidad de su pueblo promoviendo la homogeneidad religiosa. Protegió la ortodoxia y persiguió el paganismo, el judaísmo y las herejías.

Clausura de la Academia de Atenas

En 529 clausuró la academia platónica de Atenas, dando lugar al éxodo de intelectuales paganos a Persia.

El Final del Reinado de Justiniano

El final del reinado de Justiniano careció de la brillantez de los años anteriores, el Imperio que recibieron los siguientes soberanos fue un país desequilibrado, que despertaba abruptamente del sueño de revivir las glorias de la vieja Roma.

Heraclio (610-641)

. Aprovechando el escàndalo que causò el saqueo de Jerusalèn por los persas y el robo de las reliquias de la Vera Cruz, exigiò contribución de la Iglesia, que puso a disposición del emperador sus grandes riquezas e incluso aportò monjes para que nutrieran el ejèrcito. • De este modo logrò recuperar los lugares santos.• En 674, reinando Justiniano II, los àrabes llegaron a sitiar Constantinopla y repitieron su intento cuatro veces màs. Por fin desistieron y firmaron un tratado de paz por 30 años. El arma disuasoria fue el fuego griego, una mezcla que ardìa al contacto con el agua salada y debajo de ella (azufre, cal, petròleo en bruto y otros elementos), lo lanzaban a las naves y las destruìan. Su fòrmula era secreta e inspirò terror entre los enemigos de Bizancio y le permitiò cosechar importantes victorias.navales.

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