John Locke: Estado de Naturaleza, Propiedad y Contrato Social en su Pensamiento Político

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El Pensamiento Político de John Locke: Estado de Naturaleza, Contrato Social y Derechos

Estado de Naturaleza según Locke

En su teoría política, John Locke, al igual que Hobbes, parte del concepto de "estado de naturaleza". Este se define como la situación hipotética en la que se encontraban los seres humanos antes de consentir formar parte de una sociedad civil.

A diferencia de Hobbes, quien concebía al hombre como un ser egoísta ("el hombre es un lobo para el hombre") y al estado de naturaleza como una guerra constante, Locke presenta una visión más optimista y realista. Los hombres no son inherentemente malvados, ni tampoco "buenos salvajes" como propondría Rousseau. Locke adopta una posición intermedia.

Según Locke, en el estado de naturaleza, los hombres son libres, iguales e independientes. Están sujetos a la ley natural, una ley moral universalmente obligatoria, promulgada por la razón humana, que refleja la voluntad de Dios. Esta ley natural enseña que todos los individuos poseen derechos y poderes inherentes.

Derechos Naturales y Propiedad Privada

Los derechos naturales, derivados de la ley natural, incluyen la igualdad, la libertad, el derecho a la propia conservación y el derecho a disponer de la naturaleza para subsistir. Además, existe el deber de no dañar a otros en su vida, salud o posesiones.

Locke dedica especial atención al derecho de propiedad. Para él, el fundamento legítimo de la propiedad es el trabajo. El trabajo, sin embargo, está sujeto a límites racionales, como la prohibición de acaparar bienes innecesarios para la subsistencia o el desperdicio de recursos.

Locke extiende el concepto de propiedad al dinero, considerándolo un bien no perecedero que facilita el intercambio y la subsistencia. También reconoce un derecho natural a la herencia, estableciendo que los padres tienen el deber de proveer económicamente a sus hijos.

Al enfatizar el derecho a la propiedad privada como un derecho natural, Locke refleja la mentalidad de los propietarios whigs, una tesis fundamental del liberalismo.

El Contrato Social y la Legitimidad del Gobierno

Para Locke, la tendencia social del hombre es natural, incluso de origen divino.

La constitución de una comunidad civil se basa en el consentimiento libre y voluntario de los individuos. Este consentimiento, y solo este, es lo que saca a los hombres del estado de naturaleza y los sitúa en una comunidad política. Este convenio puede ser expreso (un acuerdo explícito) o tácito (cuando un individuo se incorpora a una sociedad ya establecida).

Las teorías del contrato social, como la de Locke, son teorías legitimadoras. No buscan ofrecer una historia del origen de la sociedad, sino que se centran en cuestiones de derechos y legitimidad.

Al formar una comunidad política, los hombres renuncian a los poderes que poseían en el estado de naturaleza y los delegan en la sociedad. Estos poderes son representados por una autoridad común.

Sin embargo, los individuos conservan sus derechos naturales, ya que este es el fin principal para el que se construye la sociedad.

División de Poderes y Gobierno Representativo

Locke propone una división de poderes para evitar la concentración del poder y el abuso del mismo. Esta división incluye:

  • Poder Legislativo (poder supremo): encargado de crear las leyes.
  • Poder Ejecutivo: encargado de ejecutar las leyes.
  • Poder Federativo: encargado de las relaciones exteriores de la comunidad.

La ley que rige la sociedad es la ley positiva, que debe inspirarse en la ley natural.

El pacto social requiere el consentimiento individual de cada miembro. El gobierno resultante es un gobierno representativo cuyo objetivo es el bien común, sin poder actuar nunca en contra de los derechos individuales.

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