Karl Marx: Contexto histórico, filosófico y visión humanista del trabajo

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Contexto histórico y filosófico de Karl Marx

Contexto histórico

El contexto histórico en el que se desenvuelve la filosofía marxista se caracteriza, desde el punto de vista político, por el auge de determinados movimientos revolucionarios liberales que van a ir minando y acabando con las viejas y obsoletas estructuras políticas del Antiguo Régimen, colocando en su lugar modelos políticos liberales. Todo ello se debe, en gran parte, a la creciente importancia social y política de la burguesía como clase social (Revoluciones de 1830 y 1848). A estos movimientos hay que sumar los movimientos sociales que reivindican mejoras laborales y económicas para el proletariado en el contexto de la expansión de la Revolución Industrial, la cual está aportando grandes avances económicos y tecnológicos, pero manteniendo al proletariado en condiciones indignas de explotación y miseria.

Contexto filosófico

El contexto filosófico en el que se desarrolla su pensamiento está marcado por la presencia del filósofo alemán Hegel y sus herederos. No obstante, también conviene hacer referencia a algunos pensadores que, teniendo poco o nada de hegelianos, dejaron su huella e impronta en el ambiente intelectual del siglo XIX: en primer lugar, los economistas defensores del liberalismo económico y, en segundo lugar, los socialistas utópicos y los anarquistas.

El humanismo marxista y la teoría de la alienación

La concepción materialista del ser humano

Marx concibe al ser humano como un ser vivo que, al igual que otros seres vivos, tiene una serie de necesidades materiales básicas relacionadas con su supervivencia, no solo como individuo sino también como especie (comida, protección, vestido, sexualidad, etc.). A diferencia de los animales, el hombre satisface esas necesidades transformando la naturaleza a través de su trabajo. Al hacer esto, el hombre humaniza la naturaleza.

Conviene señalar que esta actividad transformadora de la naturaleza no la realiza el hombre en solitario, sino junto a otros hombres, es decir, en sociedad: en el trabajo se unen y se vinculan los hombres unos con otros. Es a esto a lo que Marx llama producción social de la vida: el hombre se relaciona con otros hombres para producir aquellos medios que permiten satisfacer sus necesidades materiales (comida, vivienda, vestido, etc.). En este sentido, Marx considera que el hombre se constituye como individuo en la sociedad; de ahí que diga que "el hombre es el conjunto de sus relaciones sociales". El hombre es el resultado de la sociedad y de la época histórica que le ha tocado vivir.

Sin embargo, a pesar de que el trabajo es una actividad esencial en la vida del ser humano, se ha desarrollado históricamente en condiciones que lo han convertido en una auténtica maldición, en el peor de los castigos. Marx criticó duramente las condiciones laborales de los obreros al considerar que eran alienantes. Veamos qué significa la alienación.

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