La Ley: Definición, Tipos y Características

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Pero, ¿qué es una ley? Tomás la define como “cierta ordenación de la razón al bien común y promulgada por el que tiene cuidado de la comunidad”.

Si la ley se encamina a orientar racionalmente el bien más común posible (la creación), se trata de la ley eterna (o plan divino), incomprensible en su totalidad para la razón humana, aunque podemos atisbar algo de ella.

El reflejo de la ley eterna en el mundo es la ley natural, la “participación de la ley eterna en la criatura racional”. Aquí se inscribe la ley moral humana. Sin embargo, esta ley natural sigue siendo formal y no sirve para todos los casos concretos. La ley natural lleva a la ley humana (o ley positiva, o ley civil). La ley humana es la concreción de la ley natural en las comunidades políticas. La ley humana ha de ser siempre consonante con lo que dicta la ley natural. Si no es así, sería una ley contra natura. Si una ley civil determinada es injusta, no se aviene con la ley natural, entonces es mera apariencia de ley, no es un ley real. La diferencia entre la ley natural y la humana o civil es que la primera requiere sólo de la recta razón, común a toda la humanidad, mientras que la segunda necesita también de la autoridad política que la promulgue.

Contenidos de la ley natural

  • Tendencia a la conservación del ser (esto es propio de todo ser, hay un impulso general de los entes a seguir siendo). Esta tendencia impide el homicidio o el suicidio, por ejemplo.
  • Tendencia a la conservación de la especie (impulso propio de los seres vivos). Esta tendencia posibilita la procreación o la formación de la familia.
  • Tendencia al conocimiento y a la vida social (impulso propio del ser humano). Se posibilita el progreso y la perfección intelectuales y se conecta a los súbditos con la autoridad.

Propiedades de la ley natural

  • Inmutabilidad. La ley no cambia, aunque el entendimiento de la misma puede mejorar con el paso del tiempo.
  • Indelebilidad. La ley natural está impresa en la conciencia y no puede borrarse. Por ello todas las sociedades humanas son similares en sus aspectos básicos.
  • Universalidad. Todo ser humano es racional para contemplar la ley natural y saber esencialmente lo que es bueno o no.

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