Manejo Integral del Paciente con Infección: Intervenciones de Enfermería y Tratamiento

Clasificado en Medicina y Ciencias de la salud

Escrito el en español con un tamaño de 3,77 KB

Los cuidados de enfermería en pacientes con infecciones se centran en dos objetivos principales: erradicar o inhibir el crecimiento de los microorganismos mediante la terapia antibiótica y mejorar el estado general del paciente. En algunos casos, la infección se manifiesta como un absceso, una acumulación de pus encapsulada en los tejidos, que requiere desbridamiento quirúrgico y drenaje.

Administración de Antibióticos

Los antibióticos se clasifican, según su mecanismo de acción, en dos categorías principales:

  • Bactericidas: Eliminan el microorganismo patógeno al alcanzar una concentración plasmática adecuada.
  • Bacteriostáticos: Inhiben el crecimiento y la reproducción bacteriana, dejando la destrucción final a los mecanismos de defensa del paciente.

Al administrar antibióticos, es crucial considerar:

  • Posibles alergias del paciente.
  • Horario preciso de administración para mantener niveles plasmáticos efectivos.
  • Monitoreo de la eficacia del tratamiento (signos de mejoría) y detección de efectos secundarios.

Cuidados Generales de Enfermería

Los pacientes con infecciones suelen presentar fiebre, malestar general y alteraciones en la nutrición, eliminación, respiración e integridad de la mucosa bucal. El plan de cuidados de enfermería debe abordar estas áreas:

Mejora de la Eficacia de la Ventilación Pulmonar

En pacientes encamados, la expansión torácica puede verse limitada, aumentando el riesgo de acumulación de secreciones y sobreinfección. Las intervenciones clave incluyen:

  • Cambios posturales (CP) para facilitar el drenaje de secreciones.
  • Enseñar al paciente técnicas de tos y expectoración efectivas.
  • Fisioterapia respiratoria (FR) para favorecer la eliminación de secreciones.
  • Fomentar la deambulación temprana, si es posible.

Mantenimiento de un Estado Nutricional Adecuado

La anorexia, los vómitos y la diarrea son comunes en pacientes con infecciones y pueden conducir a la deshidratación. Para mantener el estado nutricional y el equilibrio hidroelectrolítico, se recomienda:

  • Evaluar signos de deshidratación (sed, sequedad de mucosas, oliguria, signo del pliegue cutáneo).
  • Ofrecer líquidos con frecuencia, preferiblemente soluciones de rehidratación oral.
  • Si es necesario, administrar líquidos por vía intravenosa (IV) según prescripción médica.
  • Adaptar la dieta a la tolerancia del paciente, priorizando alimentos nutritivos y de fácil digestión.

Control de las Eliminaciones Renal y Digestiva

La deshidratación puede manifestarse como oliguria (disminución de la producción de orina) y orina concentrada. La diarrea, ya sea causada por la infección o por el tratamiento antibiótico, es un problema frecuente. Los cuidados de enfermería deben incluir:

  • Monitorizar el aspecto y la frecuencia de las deposiciones.
  • Recoger muestras para coprocultivo en caso de infecciones entéricas.
  • Administrar líquidos por vía oral o IV, según sea necesario.
  • Valorar la administración de antidiarreicos, solo bajo prescripción médica.

Normalización de la Temperatura Corporal

La fiebre es un síntoma común en pacientes con infecciones. Las medidas para controlar la temperatura incluyen:

  • Aplicar compresas frías en zonas estratégicas (frente, axilas, ingles).
  • Realizar masajes suaves para promover la vasodilatación cutánea y la liberación de calor.
  • Administrar antipiréticos según prescripción médica, monitorizando la respuesta.
  • Mantener un ambiente fresco y ventilado.
  • Evitar el arropamiento excesivo.

Entradas relacionadas: