Manejo de Urgencias Digestivas: Apendicitis y Dolor Abdominal
Clasificado en Medicina y Ciencias de la salud
Escrito el en español con un tamaño de 5,59 KB
Urgencias Digestivas
Apendicitis Aguda
Causa
La inflamación aguda del apéndice vermiforme se caracteriza por la obstrucción de la luz del apéndice, generalmente por un fecalito o un acodamiento. Esto es seguido por la proliferación de Escherichia coli u otra flora bacteriana intestinal, que es el origen de este proceso inflamatorio agudo.
La máxima incidencia se da entre los 15 y 24 años de edad.
Clínica
- La enfermedad se inicia normalmente con síntomas caracterizados por: dolor en epigastrio (epigastralgia), febrícula y náuseas.
- Posteriormente se manifiesta con: dolor en fosa ilíaca derecha (FID), fiebre, náuseas y vómitos, estreñimiento. En algunos casos se puede presentar diarrea. Si el paciente tuviera un apéndice retrocecal, el cuadro clínico podría aproximarse al de un cólico nefrítico.
- A la exploración: La palpación del punto de McBurney es positivo (presionar sobre la FID). Cuando avanza la enfermedad, el signo de Blumberg en FID es positivo. El signo de Rovsing puede ser también positivo (dolor en FID al realizar compresión ascendente sobre el colon descendente).
Complicaciones
- Por adherencias del apéndice con asas intestinales y peritoneo se puede producir un absceso abdominal (bolsa de pus) en las primeras 24 a 72 horas de evolución.
- Por perforación del apéndice se puede producir una peritonitis, que puede llegar a ser peritonitis aguda masiva (cuadro grave con el correspondiente íleo paralítico o parálisis intestinal).
Diagnóstico
- Cuadro clínico.
- Analítica de sangre (aumento importante de los leucocitos – leucocitosis – por el cuadro infeccioso bacteriano).
- Ecografía abdominal.
Tratamiento
- Consulta radio-médica. Posterior evacuación del tripulante a centro hospitalario para extirpación quirúrgica del apéndice (apendicectomía).
- Dieta absoluta (en caso de estricta necesidad, exclusivamente hidratación oral). Aplicar frío local. Administrar analgésicos por vía intramuscular si se retrasa la evacuación, apuntando la hora. En caso necesario, administrar antibióticos por vía intramuscular.
- No administrar en ningún caso, si se sospecha apendicitis aguda, laxantes, enemas ni purgantes.
Palpación Abdominal (Dolor)
El abdomen, desde el exterior, se subdivide en nueve cuadrantes que sirven para la localización, sobre todo del dolor:
- Epigastrio.
- Mesogastrio.
- Hipogastrio.
- Hipocondrios (derecho e izquierdo).
- Vacíos (derecho e izquierdo).
- Fosas Ilíacas (FID y FII).
A la hora de realizar la palpación del abdomen para explorar un dolor, el paciente debe estar acostado boca arriba (decúbito supino). El explorador debe tener las manos calientes y debe ir presionando la región abdominal, iniciando la exploración por un punto alejado de la zona dolorosa, a la que se debe aproximar progresivamente. Se explora el dolor a la presión, el dolor a la descompresión (signo de Blumberg: positivo), así como la posible defensa muscular. Estos dos últimos signos implican irritación peritoneal.
Dolor de Abdomen (GSB)
El dolor abdominal es a menudo debido, aunque no siempre, a una patología localizada en el interior del abdomen. El dolor puede ser referido a este desde otros lugares, como el pecho, columna o genitales.
Trastornos Leves
Existen una serie de trastornos leves que se manifiestan como dolor abdominal: la indigestión, la flatulencia (gases), el cólico abdominal leve (dolor abdominal intermitente sin diarrea ni fiebre) y los efectos de los excesos de comida o el consumo de alcohol. El dolor abdominal leve se curará si se puede descubrir y eliminar la causa. Una dieta blanda durante unos días, en ocasiones junto a la administración de un antiácido (algedrato + hidróxido de aluminio, cajón 2, botiquines A, B y C) (3 veces al día), puede resolver el problema. El calor local, en los dolores de tipo cólico, puede aliviarlos.
Emergencia Abdominal
La emergencia abdominal (fiebre, vientre en tabla, ausencia de ruidos intestinales, estreñimiento prolongado, etc.) requiere un tratamiento quirúrgico que, sin duda, es inviable en la mar. En estos casos hay que proceder a la evacuación del enfermo; se debe mantener dieta absoluta, y no deben administrarse calmantes, puesto que pueden enmascarar o agravar el proceso. Requerir inmediatamente consejo médico por radio, así como en los procesos leves que no se resuelvan en dos días.