El Matrimonio: Concepto, Naturaleza y Requisitos Legales

El Matrimonio

1. Concepto de Matrimonio

En nuestra sociedad, el matrimonio se define como la unión estable entre un hombre y una mujer, cuyo propósito es compartir la vida y sus experiencias. Desde una perspectiva laica y estatal, destacan las siguientes características:

• Bisexualidad: El matrimonio es la unión entre un hombre y una mujer. Otras relaciones de pareja entre personas del mismo sexo o transexuales no se consideran matrimonio.
• Monogamia: El matrimonio implica la unión de un solo hombre con una sola mujer, excluyendo otras formas de relaciones afectivas colectivas.
• Comunidad de vida: El matrimonio busca establecer una relación íntima y estable que abarca todos los aspectos de la vida, aunque cada cónyuge mantiene su individualidad.
• Estabilidad: La estabilidad es inherente al matrimonio, y en algunos sistemas normativos se considera perpetua e indisoluble.
• Solemnidad: El consentimiento matrimonial es un acto libre, voluntario y solemne, con formalidades que garantizan el cumplimiento de los requisitos legales. La convivencia sin estos requisitos se considera una unión de hecho.

Existe un movimiento social a favor de las parejas de hecho, debido a la tendencia a expandir la libertad, lo cual puede ser difícil de compatibilizar con la regulación jurídica familiar.

2. Naturaleza del Matrimonio

La calificación técnica del matrimonio ha sido objeto de debate entre juristas:

2.1. La Tesis Contractual

Esta tesis presenta contradicciones, ya que la autonomía privada y la posibilidad de disenso no son aplicables al matrimonio, especialmente si se considera la indisolubilidad.

2.2. El Matrimonio como Negocio Jurídico de Derecho de Familia

El matrimonio se define como un negocio jurídico bilateral típico del Derecho de familia. Sin embargo, esta definición se limita a describir el ámbito del acuerdo de voluntades, sin abordar la complejidad del conjunto normativo aplicable.

2.3. La Institución Matrimonial

El matrimonio se basa en el consentimiento de los cónyuges, pero este consentimiento no es suficiente para determinar la existencia del matrimonio. El estatuto matrimonial está sustraído a la voluntad de los contrayentes y establecido por la ley.