Modelo OSI, Gestión de Fallas y Tratamiento de Incidencias en Redes

Clasificado en Informática

Escrito el en español con un tamaño de 7,55 KB

Modelo OSI: Una Arquitectura Jerárquica de 7 Niveles

El modelo de gestión OSI enmarca una arquitectura jerárquica de 7 niveles y permite que los usuarios vean las funciones de red que se producen en cada capa, donde se comprende cómo es que viaja la información a través de una red. Por el cual se visualiza cómo la información o los paquetes de datos viajan desde los programas de aplicación (por ejemplo, hojas de cálculo, documentos, etc.), a través de un medio de red (por ejemplo, cables, etc.), hasta otro programa de aplicación ubicado en otro computador de la red, aún cuando el transmisor y el receptor tengan distintos tipos de medios de red.

Las dos únicas capas del modelo con las que, de hecho, interactúa el usuario son la primera capa, la capa Física, y la última capa, la capa de Aplicación.

  • La capa física abarca los aspectos físicos de la red (es decir, los cables, hubs y el resto de dispositivos que conforman el entorno físico de la red). Seguramente ya habrá interactuado más de una vez con la capa Física, por ejemplo, al ajustar un cable mal conectado.
  • La capa de aplicación proporciona la interfaz que utiliza el usuario en su computadora para enviar mensajes de correo electrónico o ubicar un archivo en la red.

Capas del Modelo OSI:

  1. Aplicación
  2. Presentación
  3. Sesión
  4. Transporte
  5. Red
  6. Enlace de datos
  7. Físico

Gestión de Fallas en Infraestructuras TIC

La gestión de fallas permite a las empresas tener un monitoreo constante del estado de su infraestructura de Tecnologías de Información y Comunicaciones (TIC) que permite detectar fallas y posibles problemas en dicha infraestructura, incluso antes de que ocurran, lo que, a su vez, facilita la detección de fallas (de manera reactiva y proactiva); la programación de mantenimientos, el manejo del personal de mantenimiento y resolver la falla. Este proceso no se limita al monitoreo, incluye también el ciclo de vida de la falla de un componente de la infraestructura de TIC, lo que hace posible dar seguimiento a la falla (el estado del equipo, del segmento, de la red completa o del sistema) desde que se recibe la alarma o incluso desde antes, y hasta que el problema se solucione por completo.

ASN.1: Especificación de Formato para Modelos OSI y TCP/IP

ASN.1 especifica el formato y los lineamientos para las definiciones de las clases de objetos utilizado ampliamente en el desarrollo de normalizaciones relacionadas con los modelos OSI y TCP/IP.

Tipos de Componentes de ASN.1

Existen dos (2) tipos de componentes de ASN.1 tales como: el componente de aplicación y de transferencia.

Componente de Aplicación

Es la forma de cómo el usuario ve los datos a través de las aplicaciones, que no es más que un conjunto estructurado de información. En tal sentido, el componente de aplicación es quien debe proporcionar una representación de estos datos que se puedan convertir en bits, que esté relacionado con la sintaxis de los datos. Asimismo, para el componente de aplicación, la información se representa en una sintaxis abstracta que trata con tipos de datos y los valores de esos datos para intercambiar información entre componentes de aplicación en sistemas diferentes (heterogéneos). De esta forma, es como los protocolos de la capa de aplicación describen sus PDU en términos de esta sintaxis.

Componente de Transferencia

Los datos recibidos de una aplicación se muestran como una secuencia de octetos binarios (10001110 = A, 00110101 = s), donde estos se pueden ensamblar directamente en Unidades de Datos de Servicio (SDU) para ser transferidos entre capas (Aplicación, Presentación) y en Unidades de Datos de Protocolo (PDU) para ser transferidos entre entidades de una misma capa. Para el componente de transferencia, la sintaxis de transferencia especifica la representación de los datos que se van a intercambiar entre los componentes de transferencia de datos. La traducción de ambas sintaxis, la abstracta y la de transferencia, se realiza por medio de reglas que especifican la representación de cada valor de los datos de cada tipo de datos.

Tratamiento de Incidencias en Redes

El tratamiento de incidencias es el proceso por el que se identifican o tratan los errores o posibles futuros errores, que resulten de un incidente y cambiar el proceso de forma que sea poco probable que el error se repita, por la que es primordial recuperar, en el menor tiempo posible, el nivel habitual de funcionamiento del servicio y minimizar en todo lo que se pueda el impacto negativo en la organización, de forma que la calidad del servicio y la disponibilidad se mantengan. Las incidencias que no pueden ser resueltas rápidamente por el equipo de ayuda al usuario, son asignados a un especialista del equipo de soporte técnico. La resolución del incidente debe ser ejecutada lo antes posible para restaurar el servicio rápidamente. La prioridad se asigna según:

  • Impacto: Afectación del negocio y/o número de usuarios afectados.
  • Urgencia: Tiempo máximo para solución y/o nivel de servicio o ANS.

Sistemas de Soporte de Operaciones (OSS) y de Negocios (BSS)

Los Sistemas de Soporte de Operaciones (OSS) se refieren principalmente a los sistemas de red que están directamente vinculados con la operación de la misma, por ejemplo, configuración de los elementos, detección temprana de fallas, mantenimiento, etc. Básicamente, es lo que permite a los operadores de telecomunicaciones mantener el servicio móvil en funcionamiento. El Sistema de Soporte de Negocios (BSS), por su parte, es el elemento complementario y se encarga de la administración de los elementos del negocio para los operadores de telecomunicaciones. Estos incluyen herramientas para atención al cliente, cobro, facturación.

Ambos sistemas son fundamentales en la planificación y gestión de las redes, además del desarrollo de servicios innovadores y relación con los clientes.

Pasos para la Gestión de Incidencias

  1. Registro: El primer paso para empezar a gestionar de forma correcta es realizar el registro de la incidencia de manera inmediata.
  2. Clasificación: Recopilar toda la información necesaria que ayude a la resolución de la misma.
  3. Diagnóstico: En este paso se examina la incidencia para determinar si se puede identificar con alguna otra incidencia que ya haya sido resuelta y aplicar el procedimiento que ya había sido asignado.
  4. Resolución: La resolución es el objetivo fundamental de la gestión de incidencias y si no puede solucionarse en primera instancia, debe seguirse un protocolo para que los usuarios con mayor responsabilidad intervengan en su resolución. Durante todo este proceso, los estados de las incidencias irán cambiando para tener en todo momento la información actualizada y poder actuar en base a los mismos. Una vez resuelta, se debe informar a los usuarios implicados de su resolución, reclasificarla y por último cerrarla.
  5. Control: Para poder controlar el correcto funcionamiento de esta gestión de incidencias es indispensable utilizar métricas de medición.

Entradas relacionadas: