Música Monofónica Medieval: Tradiciones Musicales Fuera de Francia

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Las Canciones Monofónicas Fuera de Francia

Canciones en Inglaterra

A partir de la conquista de Inglaterra por los normandos en 1066, el francés[1] se adoptó como idioma de los reyes y de la nobleza. El rey inglés gobernó tierras francesas (era duque de Normandía y, más tarde, lo fue de Aquitania). La casa real patrocinó la actividad de trovadores y de troveros, y la nobleza participó en el desarrollo de la poesía y la música; el mismo Ricardo I, Corazón de León (1157-1199), escribió canciones en francés.

Sin embargo, se han conservado muy pocas canciones en inglés medieval, la lengua de las clases media y baja; por lo tanto, nuestros conocimientos de la música medieval inglesa, según Richard Hoppin, dependen del interés que las élites religiosas, económicas e intelectuales tuvieron en preservar su propia música.[2]

Pero los textos ingleses conservados, de carácter narrativo, profano o religioso, se escribieron para ser cantados. Se conservan muy pocos ejemplos de canciones inglesas con música.

Minnesänger

El término se refiere a los poetas-músicos cuyo idioma fue el alemán medieval.

Su apogeo se produjo entre los siglos XII y XIV.

El concepto del amor (Minne) es el tema central de las canciones. Al parecer, era aún más espiritual que el fin’ amors; la fidelidad y el deseo de servicio son conceptos presentes de manera continua en los textos, posiblemente por su relación simbólica con la lealtad a los reyes y a la Iglesia.

La mayoría de las canciones poseen la forma Bar (Barform, según la denominación de los musicólogos alemanes de finales del siglo XIX), caracterizada por la estructura AAB, en la cual “A” es la música utilizada en las dos primeras estrofas (denominadas Stollen), cuya métrica y esquema de rima es común a ambas, y la sección “B”, denominada Abgesang, es, generalmente, más larga que las Stollen y puede acabar con la melodía de estas o, al menos, con su sección final.

El estilo melódico de estas canciones suele ser más estrictamente silábico que en las canciones trovadorescas y troveras.

El ritmo suscita los mismos interrogantes que en las canciones de trovadores y de troveros.

Los géneros son semejantes a los producidos en Francia.

Canciones en Italiano

Se han conservado muy pocas canciones con textos italianos anteriores al siglo XIV. Han llegado hasta nosotros algunas laude, canciones monofónicas sacras, no litúrgicas. Fueron compuestas en las ciudades, no en las cortes, en el seno de las cofradías, agrupaciones de ciudadanos que se congregaban para orar y para el mutuo auxilio. La tradición de la composición de estas canciones perduró durante varios siglos. En los siglos XV y XVI fueron obras polifónicas.

Canciones Monofónicas en la Península Ibérica

El término genérico que designa las canciones monofónicas peninsulares es el de cantiga. En la lengua característica de estas piezas, el galaico-portugués, se produjeron dos colecciones principales:

  • Cantigas de Amigo

    Obra del poeta Martín Códax. Solo se han conservado siete, seis de ellas con música. Son de tema amoroso y, en ellas, las referencias locales son constantes.

  • Cantigas de Santa María

    Elaboradas entre ca. 1270 y ca. 1290, durante el reinado de Alfonso X, El Sabio, rey de Castilla y de León. Son más de cuatrocientas y se conservan en cuatro manuscritos, muy decorados[3]. Uno de los manuscritos contiene la colección completa. Constan de un prólogo (en el que habla el propio rey; no sabemos con certeza si él mismo participó en la composición de algunas piezas) y de dos tipos principales de cantigas: de alabanza a la Virgen (cantigas de loor) y narrativas (de miragres), que cuentan milagros atribuidos a María. La colección sigue un orden predeterminado: cada 10 cantigas, una es de loor, el resto, de miragres. La forma de las cantigas es variable, pero todas tienen estribillos y muchas de ellas —la mayoría— se aproximan a la estructura del virelai. La transcripción del ritmo es, como en todas las canciones profanas y no litúrgicas, motivo de incertidumbres y objeto de discusiones.

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