Nietzsche frente a Sócrates: La Dialéctica Cuestionada y la Transmutación de Valores

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La Crítica de Nietzsche a Sócrates y su Dialéctica

Este fragmento explora la crítica de Friedrich Nietzsche a Sócrates, centrándose en la introducción y el papel de la dialéctica.

La Dialéctica y la Preponderancia de la "Chusma"

Con Sócrates, según Nietzsche, se introdujo la dialéctica; con ella, la "chusma" comienza a mandar, a "preponderar". Esto se asocia con una transmutación de los valores. Nietzsche argumenta que cuando los mandatarios imponen sus decisiones, "ordenan" sin razonar, sin ofrecer "motivos", la dialéctica se vuelve innecesaria. En tal contexto, el dialéctico se convierte en un "payaso". Sócrates, para Nietzsche, es precisamente un payaso que abusa de esta dialéctica.

A pesar de esta caracterización, Sócrates consiguió credibilidad. De esta forma, la dialéctica, aunque Nietzsche la considera no sólida, sirve a los débiles. Se observa cómo, con la dialéctica, la plebe cobra mayor importancia y domina, ya que estos individuos, calificados por Nietzsche como "débiles" o "enfermos", utilizan este arte y sus razonamientos para imponerse.

El Dudoso Mérito de Sócrates

Además, se le atribuye a Sócrates el dudoso mérito de haber incorporado a la sociedad este arte que, según la perspectiva nietzscheana, no es propio de los hombres fuertes. Nietzsche desprecia los conocimientos alcanzados mediante la razón, sosteniendo que aquello que no necesita razonamiento o demostración posee un valor superior. En una sociedad donde la autoridad no recurre a razones, la dialéctica pierde su sentido. Una dialéctica que no logra convencer, argumenta Nietzsche, carece de solidez.

Estructura Argumentativa de la Crítica Nietzscheana

Aunque Nietzsche es conocido por "filosofar a martillazos", en su crítica a Sócrates se puede identificar la siguiente estructura argumentativa:

  • Premisa 1ª: La dialéctica es propia de payasos y de personas que deben conquistar su propio derecho; es decir, de los débiles y enfermos.
  • Premisa 2ª: Sócrates utilizaba esta dialéctica.
  • Conclusión: Sócrates fue un payaso y un hombre incapaz de conquistar su propio derecho por sí mismo y, por ello, recurrió a la dialéctica.

La Dialéctica según Nietzsche: Instrumento de Decadencia

Definición y Visión Platónica Contrastada

La dialéctica se entiende tradicionalmente como el arte de discutir con razones, sin recurrir a lo sensible, con el fin de hallar la verdad. Adquiere una gran importancia en Platón, para quien se convierte en el instrumento fundamental para acceder al Mundo de las Ideas. Sin embargo, el texto presenta la visión nietzscheana, que es marcadamente negativa: la dialéctica se identifica como el resultado de la corrupción de una cultura y como un instrumento de los débiles para imponerse. Se la considera un arte que fue rechazado antes de Sócrates pero que, con la llegada del filósofo griego, logró imponerse.

La Dialéctica como Engaño

Como se ha mencionado, esta dialéctica, según Nietzsche, convierte al hombre en un payaso por el mero hecho de usar razones, restándole credibilidad. Se la presenta como un arte poco sólido y como un instrumento de individuos débiles, como Sócrates.

Por otra parte, Nietzsche se opone frontalmente a la dialéctica porque, como hemos dicho anteriormente, esta emplea razones huyendo de lo sensible, que para él es lo que marca la realidad. Para Nietzsche, la dialéctica es un engaño perpetrado por los grandes filósofos de Occidente; es un timo, ya que no sirve para acceder a ningún "mundo inteligible" ni para alcanzar el conocimiento de ninguna verdad trascendente. Sostiene que tan solo la utilizan los débiles, aquellos que apenas poseen voluntad de poder, e intentan emplear la dialéctica para ascender en la jerarquía social. Con el uso de esta dialéctica, concluye Nietzsche, se ha llevado a cabo una profunda transmutación de los valores.

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