El Paisaje Holandés del Siglo XVII: Una Mirada a la Pintura y la Cartografía
Enviado por silvia y clasificado en Plástica y Educación Artística
Escrito el en español con un tamaño de 2,32 KB
El Paisaje Holandés del Siglo XVII
El paisaje pictórico holandés del siglo XVII se diferencia del resto de Europa por sus subgéneros. Encontramos cinco tipos:
1. Manierista de Origen Flamenco
Desarrollado en Bruselas y Amberes, este estilo, extendido por Holanda gracias a autores como Van Mander, Coninxloo, H. Bol o Avercamp, presenta una figura italianizante con montañas idealistas.
2. Tipo Barroco o Prerrománico
El subgénero menos presente, con inspiración literaria, relacionado con la sátira, el teatro y Salvator Rosso. Cada subgénero dependía del encargo al autor.
3. Tipo Clásico Arcadio
Artistas holandeses en Italia, siguiendo la luz y el paisaje bucólico de Claudio de Lorena, con pequeñas figuras pastoriles y árboles enmarcando la escena. Ejemplo: Grupo cruzando el río, Jan Asselyn, 1646.
4. Tipo Clásico Albertino
Se utiliza la perspectiva con punto de fuga y motivos arquitectónicos. Ejemplo: La plaza y la Iglesia de Santa María de Utrecht, Pieter Saenredam, 1663.
5. Tipo Empírico
Ejemplo: Vista de Haarlem, Jacobo van Ruisdael, 1670. Se caracteriza por:
- Línea de horizonte baja.
- Carácter atmosférico.
- Ausencia de enmarcación.
- No se usan ruinas ni árboles.
- Importancia de los campanarios como puntos en el horizonte y presencia humana.
- Figura humana ausente o como un pequeño punto, sin llamar la atención.
- Gran tamaño de los cuadros.
- Tendencia a la monocromía, con marrones y grisáceos.
- Gran protagonismo del cielo y del agua que lo refleja.
Relación con la Nueva Actitud y con la Técnica Cartográfica (Alpers, Gibson y Besse)
Estos autores argumentan que el paisaje empírico no surgió del propio arte, sino que está vinculado al desarrollo de la cartografía en los Países Bajos durante el siglo XVI. Los artistas estaban influenciados por su época. La cartografía en Amberes en el siglo XVI experimentó un gran desarrollo debido a la necesidad de mapas precisos, impulsada por encargos de Felipe II a artistas-cartógrafos. Pintores-cartógrafos como Hoefnagel no solo creaban mapas, sino también vistas de ciudades, marcando el inicio de la representación del paisaje en la cartografía holandesa.